tiene que notarse en algún lugar y a parte de llevárselo crudo (como todo dios), lo emplean en España en compras de terrenos -que tanto abundan en la Castilla la Mancha de Cospedal-, y que tan buenos favores hace a sus amigos empresarios y bancarios.
Esta finca pertenece al banquero Botín -que ya de por sí tiene nombre de algo robado-... está en Ciudad Real y consta de 11.000 hectáreas y se llama El Castaño.
Posee un pista de aterrizaje para su "Cessina Citattion", y ha solicitado al gobierno de la nación contruir un nuevo aeropuerto de kilómetro y medio para aviones de mayor tonelaje; oliéndose que el de Castellón está en un tris de cierre. De este modo se haría con el peaje de los vuelos de la zona. Es más lo destinaría como campo de ocio: caza, tenis, golf. Todo un lujo para depredadores como el señor Botín.
La finca dispone de 20 casas donde viven las familias de guardeses y rodeada de alambre electrificado para que la caza mayor no irrumpa en los jardines y se coma la hierba.
Y si de hierba hablamos, el paraje también tuvo una visita inusual de una avioneta que se estrelló en las inmediaciones cargadita con 200 kilos de hachís, y cuyos camiones de transporte esperaban en la finca del señor Botín. Éste, al parecer, no sabía nada del caso de los dos narcos: uno español y otro marroquí, que murieron en el accidente. Las autoridades dieron carpetazo al asunto y asunto aconcluído. ¿Era la primera vez que avionetas, como la del señor Botín, cargadas de droga, aterrizaban en sus angares? Lo bueno es que el uso privativo no es delito, y el señor Botín debe tener muchos amigos a quienes invitar los fines de semana.
lunes, 1 de septiembre de 2014
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