El papa de visita a Irak. Nunca antes había estado un Papa haciendo las juderías. Es evidente que el fin de la pandemia, trae consigo el Nuevo Orden Mundial, impreso en la Agenda 2030. También, Franc, lleva una chapa de contrayente, de implicado en el cambio mundial. Y, ¿por qué no habría de estarlo? Expresamente fue elegido para ese menester después de que se negaran el resto de cardenales a cumplir el futuro genocidio implantado por China en el resto del mundo. El modelo chino es el que han elegido como sistema de mando en los cinco continentes. Ahora que no se pueden tocar, cara a la galería, por el virus, llevan todos la chapa pinchada en el lado izquierdo de sus ropajes. Lo que sorprende es el cambio tan significativo que ha pegado el papa en su cuerpo. Está totalmente desmejorado y no me sorprendería que le estuvieran suministrando alguna pócima de los santeros que tuvo haciendo santería, en los jardines del Vaticano.
¿Lo estarán envenenando poco a poco. Ha engordado y sus piernas se niegan a llevar semejante cuerpo, y el peso del hábito.
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