la jugada de Sánchez era averiguar cuantos españoles están de su parte habida cuenta de que en todos los lugares donde se presenta la gente le abuchea e insulta a sabiendas, claro, que es el presi de España. Pues con todo y con eso la gente le deja a la altura del betún de los zapatos del monarca, al que acompaña como su sombra con la finalidad de que la gente no la tome contra él. Y ni con esas. Los vítores al rey son sonajeros para los oídos, mientras los abucheos son de traca valenciana.
Aún, así, ha conseguido que de toda España se desplacen 4.000 españoles socialistas, a darle el ánimo necesario para seguir en el poder. Si somos 48 millones de españoles, Sánchez se ha motivado con esos 4.000 que se habían desplazado con autobuses y gastos pagados por las arcas del Estado.
En su comparecencia de los cinco días de supuesta meditación transcendental... han sido esos 4.000 españoles quien le han dado la dinámica de voluntad necesaria para seguir en el puesto. ¡Es el puto amo!
Y lleva razón el bueno de Oscar haciendo la rosca a su jefe: <<Es el puto amo>>, por querer hacer de España y los españoles lo mismo que Maduro, en Venezuela, o los Castro, en Cuba. Una dictadura, muy dura, como escarnio a los abucheos, a los sinsabores que están haciendo pasar a Begoño.
Es verdad que nunca antes se había dado el caso que nos ocupa con Sánchez. Los españoles creíamos que lo habíamos visto todo, en política, pero con Sánchez ha sido la gota que ha colmado el vaso.
En estos cuarenta y cinco años han estado, los socialistas, esperando encontrar al Pedro necesario para llegar a conseguir la ansiada sociedad comunista, al más puro estilo China. Se ha conseguido y en ello estamos.
No hace falta decir los efectos que ha conseguido el retiro de Sánchez a nivel opinión europea: Sánchez y España, lo peor de lo peor. Con estos parabienes mentales nos vamos a quedar sin turismo, y sin nadie que quiera visitar un país que tiene los mismos trazos de un dictador próximo a Xi Jinping o Kim Jonh-Un. Un majadero como Sánchez o viceversa.
Ahora tenemos a la oposición cagada de miedo de poder agarrar el poder donde lo pueda dejar Sánchez, porque no va a tener los bemoles de nivelar el descalabro político de la psoe, a la que deberíamos haber llevado de haber hecho, adecuadamente, la política correspondiente. Feijóo se va a encontrar un agujero de fosa séptica imposible de limpiar. Por lo que a esta opoisicón del PP se está agrandando el miedo que tiene Feijóo de asumir el cargo. Y como su oponente más inmediato no es la psoe sino VOX, pues aún se le atraganta más el cargo de presidente nacional. Creo, ahora más que nunca, que debería ser Abascal quien asumiera la presidencia en lugar de Feijóo. Éste es un tonto a las tres y después todo el día, que dijera Federico.
Asumamos los españoles la oposición necesaria para que la psoe deje el cargo nacional y tengamos un sustituto que nivele los deberes de España con Europa. El único partido que puede asumirlo es VOX, por la cantidad de gente capacitada (intelectural) que tienen en sus filas.
Mandemos a Sánchez y a Begoña a la cárcel de los ladrones de ecpatía, y pongamos manos a la obra de reconstruir lo que han estado destruyendo los sanchistas en estos años de estorbo y deshonra.
¡Madre que vergüenza para los españoles dar la cara sin bajar los ojos!
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