viernes, 27 de junio de 2014

un rey: republicano.

 El rey Felipe VI, junto a Artur MasComo si de San Malaquías se tratara, la profecía estaba cantada. Ni videncia, ni bola adivinatoria, simplemente dándonos cuenta de que el monarca saliente estaba más por Cataluña, que los mismos catalanes. Ante la inseguridad que daba la edad, Juan les pidió a los catalanes (élite), se hiciera cargo de su muchacho si le metía el cuerno algún rinoceronte o elefante árabe. Y yo me pregunto ¿por qué no recurrió a los pelotas juancarlistas? Y, es fácil de responder: a la familia ni en la mesa. Y a los extraños fuera; siempre y cuando, no sean de robar. 
Ha dicho que se enorgullece de los catalanes por su amor a su tierra y que eso, les hace ser una gente admirada, respetada y querida. En una palabra: republicano. Yo nunca lo hubiera creído si no sintiera las ganas de coger una mochila y hacer el camino de Santiago para ver, si el muerto, se erigía en vivo. Y poderle preguntar si los catalanes oriundos de Turquía, eran así de tontos como los catalanes turcos revenidos a catalanes españoles. Creo que a mí me daría un soponcio si el santo se elevara sobre la tumba, pero él moría dos veces al ver las gilipolleces en las que caemos dos mil años de historia después. Que dos mil años después haya un Mas, un Pujol, un pijo Gallardón, es para morir cuantas veces sean neceser; y si hay que repetirlas, se repiten.
El muchacho está haciendo una turné por el territorio español para saber dónde se meten las masas cuando no ven la televisión o viéndole a él subido en ese descapotable -mano a modo perrito lunatrasero-600-, por las calles tomadas por la policía, en Madrid. Y me parece hasta mentira que no sepa, con la edad que tiene y la experiencia de su esposa, que los españoles siempre estamos en el bar. Menos su esposa, que está de disco...
 En fin, que dado el compromiso adquirido por el padre, el hijo, se dedica a hacer propaganda de Cataluña y dentro de poco, lo veremos con una pancarta o agarrándose con cadenas a alguna farola emblematica -que para eso es el Rey-renovado-, y con Vestringe al lado, -que para eso sí es compatriota-. La  Espe se sumará al carro -por lo de los saráos-, y a Mas se le hará el culito cocacola de verse reconocido, aunque no manipulado -que lo està. Yo me llevaba de comparsa a la Botella y al pijo de Gallardón, para que entre todos hicieran el día del Orgullo Gay catalán, ya que en Madrid no los van a dejar enseñar palmito o empalmaditos; a modo de grosero Urdangarín.
Total que el Fe...VI, está por la labor de que Cataluña se haga reino independiente y que su padre -abdicado-, tome las riendas de dicho reino, hasta que Dios en su sabiduría y bondad, se lo lleve al cielo de las meretrices, concubinas, y todo lo que suene a meter. Al apartado real donde sus hermanos los árabes estén concentrados porque ellos sí saben como cuidarse bien, entre niños, niñas, y burkas.
Bueno, pues, el muchacho ha llamado a la entifada catalana, a hablar catalán en toda España -y no sólo en la intimidad-, (como hacía Aznar), y que Mas es de lo más de lo más de campechano -como su padre, era-; que le quiere como si fuera su tata, y que gracias por todo lo que cataluña (Mas, Jordi...) ha hecho por él. Y en ese momento de feliz acontecimiento la Reina Leti ha llorado lágrimas de cocodrilo africano, como Nefertiti lloró al lado del Nilo. ¡Pero que memos y gilipollas...!

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