Al parecer, en la antigüedad, no teníamos luna o satélite orbitando la Tierra, fue posterior que ese domo se agarró a la rotación terrestre por atracción de masa. Por lo tanto la Luna no era un satélite natural de la Tierra y sí un planeta que rondaba buscando compañía. Y, la encontró. Esta teoría me gusta más que la del choque que nos dimos contra un planeta más grande, y, de los cascotes se originó el satélite lunar. Dos contrariedades veo en esta explicación. En primer lugar, deberíamos tener un planeta mayor adherido al domo terrestre. Por lo tanto la Tierra se vería algo destartalada y no un globo redondo. En segundo lugar, es difícil completar, con restos de ambos planetas un globo lunar: este también, tendría unas proporciones raras y destartaladas. O se vería como un aro rodeando un planeta amorfo. Algo no encaja.
Pero, ahora, viene lo que de verdad me da más miedo de todo:
La Luna se está desplazando 4 centímetros por año, de la atracción terrestre. Es decir, buscaría la ruta que vinía haciendo antes de quedar suspendida a la rotación terrestre.
¿Qué pasaría si la Luna partiera y nos quedáramos sin ella, dejaríamos de tener mareas, la pérdida de menstruación femenina, echaríamos en falta ese resplandor que nos muestra la cara amable lunar?
El tema es muy fuerte y muy tenebroso. Porque nos están diciendo que si la Luna parte nosotros vamos a desaparecer. Y, entonces, ¿quienes fueron aquellos que nos dijeron que allí arriba no había nada hace cientos, miles de años? ¿Cómo fue posible que la Luna se agarrara a la Tierra hasta una distancia de 22.500 km. sin consecuencias graves. Que ahora la observemos a 384.000 km. sin consecuencias graves... y podamos tener consecuencias con la desaparición de ese planeta orbita? Pues creo que tampoco tendríamos problemas graves. Seguiríamos rotando al rededor del Sol y echaríamos de menos ese foco por las noches. Creo, que, nada más. A lo mejor estoy cometiendo una estupidez con lo que estoy escribiendo... pero no se me ocurre discutir si vamos a desaparecer cuando hubo población que vivió sin la Luna. Vamos, digo yo.
Cuando no hay una explicación plausible de las cosas que nos suceden en este entramado vivencial y planetario que nos acoge... recurrimos a la desesperanza y remate final. No sé muy bien por qué. Pero hay gente que tiene muchas ganas que la vida en la Tierra sea temporal y tegamos que morir todos. A mí me apetece seguir viviendo y disfrutando de este maravillo panorama que tenemos el gusto de ver mires por donde lo mires. Creo que, por eso, vienen los extraterrestres a visitarnos. Al igual que nosotros nos vamos a Benidorm de vacaciones. Bienvenidos, turistas espaciales.
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