El vídeo nos demuestra, claramente, que las guerras se hacen primero en oficinas. Después se pasa a condicionar el lugar donde va a tener la acción, y, consecuentemente, contando con los daños colaterales que siempre hay en estos casos estudiados..., pero ineficaces. Primero, porque lo que se suele inventar se puede salir de madre y convertirse en otra cosa. En segundo lugar, se precisa de una gran cantidad de material: de todo tipo, para llevar a cabo el funcionamiento total. De ahí, que veamos como se han construido kilómetros de túneles para hacer, de la guerra, una larga y próspera calidad de vida. Solo con saber lo que ha costado la fabricación de los túneles y de la diversidad de empresas, divisas y otras ayudas que son precisas para llevar a cabo lo que estamos comentando. Que bien dice en el vídeo lo que se podría haber edificado: en escuelas, hospitales, carreteras y ayuda a la población, con esa cantidad supermillonaria encumbrada a la miseria.
Y nuestro majadero presidente, en Israel, a decirle a Netanyahu que debemos respetar los derechos de los niños y de la población en general. Y los de Hamas haciendo túneles para salvarse de ver a Sánchez haciéndoles el trabajo sucio, frente a Netanyahu. Todo un poema de amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario