y no parte del problema. Vox está marcando una línea de actuación muy definida y por tanto, muy apetecible para la población española. Vox sabe que mucha gente les votará porque ha ingresado en sus hogares solucionando muchos problemas que la sociedad mundial tiene asumida. Los españoles no sabemos el alcance de lo que está por venir y eso que hemos visto, en Grecia, que han vendido las piedras épicas para poder comer. En España como no vendamos el Acueducto de Segovia y las catedrales no sé cómo vamos a poder afrentarnos a la hecatombe que se avecina a toque de trompeta de Apocalipsis. No nos damos cuenta porque tenemos la tripa llena todavía de esperanza y no, de pesadumbre. Si cuando la gente vote a Vox y éste les falla... no sé cómo reaccionará la grey ante la falta de apego a quien les vendió la moto, que estaba rota. Todas las proyecciones apuntan a un desequilibrio económico como jamás se ha visto. Putin ya ha dado el visto bueno y no ha escatimado en advertirnos de que si Europa no hace un acercamiento a Rusia (también europea, según Putin) la vida de muchas personas estarán en riesgo diario.
En España no tenemos ninguna industria que nos de para comer. Ya ni siquiera tenemos trigo piara consumo interno. Rusia es un país que exporta millones de toneladas de trigo a Europa... si eso falla... no habrá pan para tanta boca. Y eso es lo que ha dicho Putin en Davos. Davos es la reforma del Nuevo Orden Mundial. El plan genocida 2030. Ese plan que conocen los socialcomunistas Sánchez e Iglesias.
Cuando acabe la pandemia del coronavirus y, tal vez, la gripe porcina... entonces vendrá la del hambre, que saciará las tripas de todos los ciudadanos del mundo.
Yo espero equivocarme pero todos los indicios apuntan a este apocalipsis mundial.
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