de relaciones entre hindúes y tibetanos.
¡Poniéndoles cachondos!
No hay mejor forma para llegar o hacer llegar a un acuerdo entre hombres que ver las pudentas partes de las féminas.
Este es el mejor ejemplo que tenemos de que las madres las preparan para todo este lío con los tíos.
Hija mía:
-si quieres comerte un colín no tienes más remedio que recurrir al desnudo.
-Si tienes que aprobar una tesis lo mejor es recurrir al desnudo.
-Si tienes que terminar la carrera porque tu padre y yo no podemos darte dinero, recurre al desnudo.
-Si tienes que ofender a una profesora porque ve que eres un putón verbenero... llámala machista.
-Si tienes que ofender a la iglesia ve y desnúdate durante la misa.
Mira, hija...
mejor ve desnuda y no tienes que coger un constipado teniendo que quitarte y ponerte la ropa tantas veces.
Las ha dado a todas por desnudarse como si con ello pudieran decir que son las únicas que tienen tetas, ombligos y chumino. Hay mucha chavala suelta que no tiene que recurrir a esas triquiñuelas porque son lo suficientemente inteligentes para vivir la vida de esa forma inteligente y al igual que sus madres -imagino- tampoco tuvieron que estar siempre con el recurso de la polla -del de enfrente- en su cabeza.
Es evidente, -y a la prueba me remito-, que las zarrapastrosas tienen que recurrir al único órdago que tienen cara a los hombres: el destape.
Me nos mal que las vamos cogiendo el tronquillo y hay menos pagafantas por las calles del mundo.
Espero, por supuesto, una suspensión y un suspenso.
Estamos escribiendo de la Cornel University. Estados Unidos.
¡En todas casas cuecen habas; y en la mía, a calderadas!
Espero, por supuesto, una suspensión y un suspenso.
Estamos escribiendo de la Cornel University. Estados Unidos.
¡En todas casas cuecen habas; y en la mía, a calderadas!
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