jueves, 27 de mayo de 2021

la masonería en la agenda 2030

puede parecer imposible e improbable... pero lo realmente impensable es que el papa Francisco se haya elegido cabeza de la masonería judeocristiana, como lo ha sido. 
No contento con llevar a cabo los fines más ímprobos contra la religión católica, se permite comparar a los comunistas como los verdaderos católicos. 
Este individuo es de lo más demoníaco que nos podamos encontrar.  O sea que, ¿está comparando a Jesús con un comunista? ¿Con Iglesias? ¿Con Cristina Almeida? ¿Con Cristina de Kirchner? ¿Con Xi Jinping? 
Por favor que alguien le quite de aparentar ser papa, que no lo es, en vida de Benedicto XVI. Y, que sepamos, aún no ha muerto a no ser que le hayan puesto un doble.
Lo llamativo es que estén la mayor parte del elenco presidencial político norteamericano, con los reyes de medio mundo y la iglesia de culto masónico... los que lleven a cabo la Agenda 2030 y las que estarán por venir.
¿Cómo podemos pensar que, entre el rey Felipe VI y Sánchez, puede haber algún contratiempo si ambos están sujetos a la Norma que rigen la Agenda? ¿Cómo podemos pensar que Sánchez no le eche una mano al rey marroquí si es miembro de la agenda 2030? ¿Cómo podemos pensar que Biden no tiene amistad con Mohamed VI si son amigos de Agenda? ¿Por qué Biden tiene más amistad con Marruecos que con España? Porque España no es comunista, aún. Y, por supuesto, España, ha sido elegida a ser destruida como si de Jerusalén se tratara. No me extrañaría que en el futuro, España, fuera el país dirigente del mundo mundial. Al margen de que las agencias estatales mundiales se encuentren en kazajistán. 
Desde luego que el mundo no lo va a conocer ni la madre que lo parió, que dijera Alfonso Guerra de España.
Por tanto
debemos pensar que el mundo será comunista, en las próximas generaciones. El mundo será un campo de concentración a modo de granja humana. Que lo catalogara el jesuita Salvador Freixedo (El Salvador que Libera) en su libro, <<La Granja Humana>>.
Por desgracia es el rumbo que ha tomado la política mundial de exterminar a la mitad del mundo humano y animal, y reconstruir un habitáculo planetario para que la élite gobierne desde atalayas afines a sus propósitos imperialistas. Por supuesto, el pueblo, mal vivirá arrastrándose por el suelo en espera de que un dron les lleve la comida y la suelte a modo de canaleta para cerdos. Ángeles y demonios, será la contienda que se librará y que, sumirá a la Tierra, en un planeta oscuro durante generaciones.

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