jueves, 9 de septiembre de 2021

ahora empiezo a comprender

<<El uno por el otro la casa sin barrer.>>
De dos cualidades que deberían disponer: vejez y sabiduría, como el demonio, les falta una. 
Mucha gente dirá que están en un cincuenta por ciento de las cualidades a tener... sí, pero, si vas al mercado a comprar pan y chorizo para hacerte un bocadillo y te olvidas el pan o el chorizo ¿cómo diantres te haces el bocadillo?
Pues ese es el problema de estos dos. Si uno tuviera vejez y el otro sabiduría... podrían hacer algo juntos; pero ya vemos que no hay nada que rascar. 
Blanco Ariel representa la dama millonaria que, por motivos de guión de alta alcurnia, piensa, que, por ser millonaria, todos la deben pleitesía. 
MomiBiden, piensa, que por ser presidente de Estados Unidos, todos tienen que bailar al son de su trompeta. Y así nos vemos con el agua al cuello. No hay más que ver lo bien que ha quedado con la bajada de bragas y la pitonada de cuarto menguante, lunar, que le han metido en salva sea la parte. 
En todo el planeta los únicos que alaban a Alá, por tan tremendo disparate del vejete momificado, son los talibanes. Nunca antes les había bajado Alá a ver, hasta que conocieron a Biden.
Hay, eso sí, un mogollón de gente que vitorea, como si de una corrida de toros se tratara, pidiendo las orejas y el rabo de Joe. 
A mí estas cosas de los trofeos me desagradan, no los comparto, pero cuando hay tanta gente de acuerdo... piensas si no serás tú el equivocado. Siempre en sentido metafórico. A nadie se le va a cortar las orejas y el rabo. Simplemente se intenta el sentido álgido a la chapuza de Biden y su comité de bienvenidos misters afganos. Que, por cierto, no sé si se los han llevado ya desde las dependencias españolas a las dependencias del señor Biden. No tengamos que quedarnos con los suyos y los nuestros, por culpa de su pomposa y nefasta Operación Trueno del Desierto. Que no sé si tiene algo que ver con salida tan apresurada de los norteamericanos y europeos, del conflicto afgano.
Total,
dos patas de banco faltándoles en equilibrio la monja catalana Teresa Forcades. 
Dos a favor de la vacuna covid y la monja, en contra. ¡Como para nivelar el banco!
Manma mía cómo está el mundo con éstos farnesios por medio.
A la curia le ha dado por decir que vacunarse es un acto de amor. Han elevado a la santidad el líquido asqueroso que inyectan en las personas. Deben de estar muy faltos de almas en el Cielo, para pedirlo con tanto cl-amor.
Estoy con Abascal cuando dice: hay que dar al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios. Que el pope se ocupe de su suyo...

No hay comentarios: