cuestionar la evidencia es ponerse una venda en los ojos o no querer ver la realidad que te une a la existencia. Lo que normalmente se llama Marianear. Es un sí pero no. Es un quiero y no puedo. Es un vivant la vie..., pero en español. Otro aforismo sería golfear.
Y dice el refranero: "A quién juega con el burro, no le faltan las coces". --Eso es lo que nos está pasando con el burro alemán: recibimos coces--.
¡¿Y luego Torrent quiere insultar al juez Llarena?! ¡Nos quejamos de nuestros jueces! Es verdad que hay de todo pero... prefiero al más malo del elenco de jueces españoles, que al mejor de la comunidad europeda. Ya estamos viendo el ridículo tan hitleriano que está haciendo la judicatura alemana. Y no digamos de sus diputados. Unos dicen una cosa y otras la contraria sobre el mismo caso. Puigdemont ha sido el mayor tornado político que mejor se ha ajustado para tomar nota de cómo está la justicia en el mundo. Todos estudian lo mismo y sin embargo, en la interpretación, dejan mucho que desear. Y, luego, decimos que los borregomatrix somos los de a pie. Es verdad que nos lo hacen creer con el fin de que, mientras nos miramos el ombligo, ellos, a su estilo, hacen el agosto. Cosechan la mies a modo de Griñán y Chaves. Una parva de 850 millones de euracos que se han embolsado del efecto Eres. ¡Eso es trillar o trillonear! Lo demás es campesinato.
Tendría y creo. Es decir, no has leído nada de lo concerniente a Puigdemont; no sabes nada de lo acontecido con este individuo; crees que los jueces alemanes han estado acertados...: por lo tanto no estás segura.
Por favor: marchémonos; salgamos de la democracia de primera clase que tiene Alemania y que tanto gusta a Mariano. Y quedémonos con nuestra mierda de democracia que nos ha servido durante 40 años para poner a Puigdemont con "pies en polvorosa". (En lenguaje germano, que es como se denominaba antes la jerga de los delincuentes)
la Fundación Konrad Adenauer ha acusado a ese tribunal de haberse excedido en sus competencias y elogia la democracia española por su corrección y su tolerancia. Wilhelm Hofmeister, que firma el artículo titulado «Cataluña y el declive de la Unión Europea», vaticina que cuando los historiadores describan el fin de la UE, «no resultará difícil prever que encuentren el comportamiento de Alemania frente al separatismo catalán como una de las causas más próximas».
la Fundación Konrad Adenauer ha acusado a ese tribunal de haberse excedido en sus competencias y elogia la democracia española por su corrección y su tolerancia. Wilhelm Hofmeister, que firma el artículo titulado «Cataluña y el declive de la Unión Europea», vaticina que cuando los historiadores describan el fin de la UE, «no resultará difícil prever que encuentren el comportamiento de Alemania frente al separatismo catalán como una de las causas más próximas».
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