Sánchez no se puede creer que le haya venido Dios a ver.
Desde que echaron a la calle a Rajoy, ha entrado en otro mundo, otra esfera, con la mente iluminada del perrito Totó, de Dorothy, en El Mago de Oz.
Olisquea como sabueso cualquier circunstancia adversa a su realidad mental. (Aunque esté por ver si tiene algo dentro de ese enorme cabezón que se gasta.)
Es indudable que es el hombre del momento. Es Jack, en misión de ser encontrado por la chica rubia, ojos almendrados y azules, 90 60 90 y un escote que no habría moneda en el mundo que no quisiera pasar por su raja. O un miembro que no quisiera hacerse una... ¡Cochinos!
La chica ha aparecido en el cuerpo de Brigitte Macron, y Sánchez va a ver su vida completada a sabiendas de que se ha fijado en él y le ha invitado.
¡Tenemos lío a la vista!
Ya solo nos faltaba que se sacrificara por España y los españoles metiéndose a gigoló de alto estanding, y diera braguetazos a diestro y siniestro. Es decir, a derechas e izquierdas. Porque sería la única manera que podríamos salir del entuerto en el que nos han metido entre todos. Y rellenar el Arca de la Alianza de Toledo, que han dejado el interior tan liso y pulido que parece obra egipcia.
Para los jubilados y pensionistas saber que solo quedan 3 mil millones de los 60 mil que había en el Pacto de Toledo. Tenemos escasamente dinero para un café solo y una pasta redondita y sin relleno. Este año los jubilados y pensionistas nos vamos a tener que comer la zona centro del donuts o a los camellos de los Reyes Magos y, con la piel, hacer bolsos para revender en el top manta. Espero que los Reyes sean de verdad Magos..., porque me veo cambiando de bando hacia Papá Noel.
España, con los años de abundancia y barriga llena, hemos ido cambiando al laicismo, que es lo mismo que a perra Laica: aquella que enviaron al espacio; al menos vio otros mundos que no están en este.
Los españoles no vamos a misa casi nunca, y no nos creemos en las cosas que nos cuentan allí. Porque si eso fuera o fuese verdad, tendría que creer en el cuento de Caperucita, también.
Pues como iba diciendo...: vamos a tener que volver al Credo y al pecado. Pecado que hicieron nuestros primeros padres, por aquello de echar un polvo en los lavabos del Edén. ¿A quien se le ocurre echar un polvo en los lavabos del Edén?, pues a papá Adán y mamá Eva. Se habían adelantado a su época en 250.000 años, y responsables de las generaciones siguientes que han ido copiando lo que han visto hacer a la parejita. Por eso, hoy, se folla también en los lavabos sucios de los cutres pafetos. ¡Todo un alarde de ejemplaridad para los jóvenes de esta generación, para pillar de todo, menos guay!
¿En qué estarían pensando...?
¡Ya vale de pensar, guarros!
Ya termino diciendo que Pedro está encantado de haberse conocido y de que hayan intentado dispararle. Aunque haya sido en un mundo paralelo; que no, para, lelo. Viene a colación el dictamen mencionado de otros periodistas que han visto, como yo, la concatenación de acontecimientos por venir, pero ya visionados.
Mirad..., con sinceridad...
no sé cómo es Sánchez. Lo juro. Yo le veo con ese porte desgarbado a modo de pastor de ovejas y esa sonrisa de "lo sé todo". Me encuentro en un sin vivir en mí, y no dispongo de espejito con mirón dentro. ¿Os imagináis el duende mirando por el espejo y la mala haciéndose un... trabajito?
Bueno, me quedo aquí. No puedo continuar porque me encuentro desorientado hacia la orientación y brújula que utiliza el Can de los Canterbury, llamado Pedro. Cuyos fantasmas de Puigdemont, Mas, Torra, Torrull, Batiborrull, y otros ...rrull por nombrar, habitan fantasmagóricamente conspirando en las mazmorras del lugar.
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