jueves, 26 de septiembre de 2019

y, !vuelta la cabra al trigo!

Imaginaros qué le puede importar a Trump y a Xi Jinping, que la temperatura del planeta suba 2 grados allá para el 2.300 de nuestra era, cuando no tenemos pajolera idea de lo que nos va a suceder de aquí a mañana con la maraña de individuos sin cuartel que tenemos en las comunidades autónomas. ¿O me queréis decir que Torra estará dando por el culo dentro de 300 años? Aunque siempre se ha dicho que mala hierba nunca muere.
Han vuelto a sacar la vocecita de la chiquilla de 16 años llorando ante los responsables del cambio climático si lo hubiera o lo hubiese. De momento no existe ese cambio climático, vamos camino de ello a medida que los sagaces hombres de la política no dejan de volcar en la atmósfera la porquería de productos químicos que no quieren depositar dentro del mar, porque ya no cabe más porquería dentro. Porque ellos saben que dentro del mar ya no hay Falla Mariana que pueda acoger tantos bidones de agua radiactiva que van tirando las mafias encargadas de esos menesteres. Este capítulo de los Simpson nos demuestra que son mafias las que se hacen cargo de hacer desaparecer los restos orgánicos e inorgánicos, que tiramos los consumidores. Y, ellos, a su vez, los depositan en las corrientes marinas para que sea la fuerza de la naturaleza quien actúe a su favor. De este modo van levantando islas de porquería que en el futuro habrán de ponerles nombre.
Los bidones de agua radiactiva tenían una duración de máxima de 100 años. ¿Por qué los animales salen a morir a la superficie, en las playas? Porque los bidones están abriéndose con el paso del tiempo y la respiración dentro del agua se hace insoportable...; a parte de que la mayor parte de los peces y mamíferos marinos que comemos en nuestras casas está contaminado hace muchos años, ya. Pero de igual modo que los árabes tenían y tienen que hacerse multimillonarios vendiendo crudo...; los chinos tienen que conseguir la riqueza a base de deforestar los fondos marinos y acabar con todo bicho viviente que viva en los mares. Por este tipo de matanza se creo el movimiento Greempeace: para no permitir que los barcos diezmaran la vida en el mar. Hasta que empezaron a cobrar grandes sumas de dinero de Rusia, China, Estados Unidos... y Greempeace dejó de hacer la labor de salvar las ballenas. Como Juan Carlos I dejó de ser padrino de los elefantes cuando le cogieron matando a uno en Wostwana. Este es el verdadero cambio climático que va a darse en el planeta: la eliminación de todo hombre inepto, ambicioso y perjudicial, para el resto de congéneres.

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