no sólo intentan meterte un micro chip en tu cuerpo con todos los datos propios y... ¿¡...!?; como para que ahora una mente prodigiosa se haya ocupado de idear una pulsera eléctrica capaz de dirigirte como si fueras la otra parte del robot que estaba fuera del control del chip. Esa pulsera tiene la capacidad de darte una descarga eléctrica en la medida que considera que lo que haces, piensas, o decides, no se ajusta a la realidad introducida dentro del aparato. Es algo parecido a la costumbre que tenemos o tienen los propietarios -educados-, de perros, cuando les dan una galleta por hacer tal cosa o se la niegan si no la hacen. El animal, llamado humano, está llegando a ser y comportarse lo más cercano a su amigo el perro. Llegará el momento en que no sabremos quién saca a quién a pasear.Lo del chip está ya autorizado, lo de la pulsera cuando alguna empresa estatal consiga hacerse con ella.No solamente viviremos narcotizados, sino que nos están haciendo a imagen y semejanza del Jesús de la Biblia. Ese homo que le pegaban y ponía la otra mejilla. Ese pastor de ovejas, malintencionadamente, llamado hombre.que se les ocurra idear?Es evidente que la voluntad a la que tenías que recurrir para convertirte en eso que supuestamente eres, te lo van a cambiar por una correa eléctrica que te mentalice, a base de descargas, a que debes cambiar tu conducta humana.Poco a poco y a base de dolor te volverás torpe y desequilibrado, cuando lleguen a desmenbrarte la mente pensante. Estos sistemas no son nuevos. Muy al contrario. Se utilizaron en la segunda guerra mundial, en los campos de concentración nazi, donde se les daban descargas a los presos para saber hasta dónde podían aguantar y qué resultado se obtenía con la mente achicharrada.De estos benefactores lugares nazis, pasarón a los siquiátricos, atontando a los pacientes que consideraban locos para apaciguar su neurosis. El resultado se lo puede uno imaginar. Diversidad de centros con multitud de pacientes para su práctica médica. Conejillos de indias que no han podido denunciar semejantes atrocidades. Sin embargo, dicen muchos, que gracias a esas prácticas se ha evolucionado en medicina. Pues ya se lo podían haber puesto ellos en los huevos. Ahora tenemos el aparato para podernoslo activar a voluntad del amparaje de la empresa expendedora. Espero que alguno se les achicharre su dilatada imaginación y carrera evolutiva.Esta es la pulsera eléctrica. Las hay en varios colores: a gusto del consumidor. ¡Qué ud. se electrocute bien!Podemos imaginar un futuro distópico, con alumnos en las aulas, llevando dispositivos como estos y recibiendo descargas eléctricas de sus maestros cuando realicen comentarios fuera de lugar o suelten los típicos chistecillos graciosos. Y en lo que sería la culminacióndel control sobre el individuo, ya podemos imaginar a posibles compañeros “avanzados o de conducta intachable”, siendo ellos los que suministren los castigos a los que disturben el buen devenir del grupo. Quizás en el futuro obliguen a todos los ciudadanos a llevar un dispositivo de este tipo, para esculpir la conducta cívica que debe tener un buen ciudadano, día tras día. Si dices una palabrota, descarga, si tiras un papel al suelo, descarga, si maldices al ver a un policia, descarga. Y con cada descarga, 3 créditos menos en tu cuenta de dinero digital. Sería la evolución natural a lo que ya existe en la actualidad.El potencial de lavado de cerebro y control de un producto de este tipo, sería enorme.
viernes, 1 de julio de 2016
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