viernes, 8 de marzo de 2024

se lo advertí

 intentar imitar a un sabio 
no te hace de su talla.
Intentar imitar a un tonto
sí te hace de su condición.
Y eso, me da, que está pasando con el lenguaje inclusivo o como Dios quiera se diga. Ahora todo el mundo habla el lenguaje de los tontos, porque imitarles nos proporciona una algarada de bocas soltando sandeces... Pero son moda. ¿Moda, decís? ¿A dónde nos quieren intentar llevar a toda esta ganadería de imitadores que no se les cae la cara... en vez de ponerte a pensar ¿qué jerga estas usando?
La verdad que da pena ver todas esas cabecitas lindas (estudiantes: por ende) no saber lo que es ciencia, naturaleza en su constitución; de lo que es percibirse contrario a lo que muestra su cuerpo. Nuestra forma física nos delata. Es verdad que si en algún momento de la historia nos hubieran dicho que éramos, en vez de hombre y mujer, Este, Esta, nos hubiera servido. Pero los géneros estaban claros: Hombre y Mujer, les creo. Un ente masculino, un ente femenino, para crecer y multiplicarse. ¿Por qué hay que cambiar esa relación, si está claramente especificada para el sentido que tiene la vida sobre el planeta? No hay un solo animal que tenga dudas sobre su condición y su relación con los de su especie. El hombre, al parecer, en vez de aumentar su autoestima... se está considerando descendiente de un ególatra y un tonto a las tres. Pero... como se lleva. Me subo al carro con un descenso pronunciado del que no sabemos si alguien se salvará del escándalo.

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