escuchar a Rufian es como pegar al viento. Un sonido asqueroso de baja nota lastimera, como fugaz, que desagrada la percepción del escuchante. Quiere aparentar una nota dominante que no tiene, de la que carece, y queda como el culo cada vez que defiende las tesis sin documentar. Siempre esta enfadado. Y lo está por carecer de personalidad propia. Cree que dando esa sensación de machote reduce la carestia de sus intervenciones. No puede ser lo que no es.
Pero el que es realmente siniestro es su compañero de ideología comunista.
Sánchez se ha estado intentando esconder detrás de la cortina de la guerra de Rusia vs Ucrania. Está intentando convencer a los españoles de que la culpa del alza de la luz, del gas, de todo lo que nos está pasando es culpa de Putin. Éste que antes había sido de sus mismas ideologías, ha pasado a ser el culpable de todos los males de España y de ser amigo de vox. Siempre intentando echar los males sobre los demás, en vez de asumir que ha sido nefasto en la pandemia y sigue siendo nefasto en todo lo demás. Bastante bien le tiene catalogado Ayuso, que ha sido la única del PP y junto a vox que le están poniendo en su lugar. Pero a esta gentuza no le hiere nada ni nadie. A Marlaska la única que le pone en su sitio es Olona, cuando se lo encuentra delante.
Ninguno de estos dos individuos hace nada por la política española. Lo único que hacen es ponzoñar y dividir a los españoles en casta desgraciada y desgraciada casta.
¡Qué asco de individuos!
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