jueves, 20 de septiembre de 2018

envidia cochina

La actriz porno Stormy Danielsla envidia cochina es todo lo contrario a la envidia sana. ¿En qué? en que la primera envidia no vas a poder obtener nunca  el objeto del deseo mientras que, en la segunda, el objeto te la trae floja. El ejemplo primero sería envidiar a Trump por haberse acostado con la señorita de la imagen aunque le haya pagado 140.000 dólares el servicio. Mientras que el segundo ejemplo sería ver a tu vecino con un coche del mismo precio y no apreciar el valor del mismo. 
Señores,
Trump niega la mayor, y no toma en confianza los rumores de la trama en cuestión. Hace lo mismo que enseñaron a Burt Simpson a decir cuando te pillan en algún renuncio: "yo acabo de llegar".
Sin embargo, la señorita ha dejado claro que Trump la tiene corta, con posibilidad de que Melania se disponga a averiguarlo. O que lo haya averiguado y se le haya quedado esa cara de mojama que se gasta. ¡Tan bonita como es, y, el careto que muestra al público!
Yo no voy a decirle a Trump que le han timado en el precio..., cada uno sabe de lo que dispone; pero estoy seguro que si hubiera acudido al amigo Berlusconi se las hubiera puesto en el plato: almeja abierta, por un muy módico precio, y más jóvenes. A esto se le llama estar al loro u ocioso, en el mercado.
Aunque, pensándolo bien, la envidia cochina y la envidia sana, están representados en el 6º pecado capital.

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