De esta forma sí se pueden dar golpes de Estado. Yo me voy a apuntar. Si alguno más tiene intención corra la voz y nos levantamos contra el Estado autonómico y el Estado Central. Así matamos dos pájaros de un tiro. Aprendamos de estos pájaros.
El juez Llarena (mitad llanto, mitad pena) ha cursado orden de detención para retornarla, para recuperarla, como si hubiera estado ida después de una noche de Burundanga.
¡Nooooooooh, por Dios! Dejadnos dormir en paz.
Juez Llarena
No sé que tiene tu boquita que les vuelves locos/ que les vuelves locos/cuando ellos te miran y tú les miras/ muy poquito a poco.../ muy poquito a poco...
Será tu forma de ser/será tu toga de juez/será tu talante formal/ será, será, tu gorra aplaná...
No sé, no sé, no sé, que tienes...
Ay, Señor, Señor, de esta salimos todos con el rabo entre las piernas y una pájara mental.
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