El Sermón del Monte

Así habló Jesús al pueblo:

Por lo tanto les digo: No se preocupen por su vida, ni por qué comerán o qué beberán; ni con qué cubrirán su cuerpo. ¿Acaso no vale más la vida que el alimento, y el cuerpo más que el vestido? 26 Miren las aves del cielo, que no siembran, ni cosechan, ni recogen en graneros, y el Padre celestial las alimenta. ¿Acaso no valen ustedes mucho más que ellas? 27 ¿Y quién de ustedes, por mucho que lo intente, puede añadir medio metro a su vida? 28 ¿Y por qué se preocupan por el vestido? Observen cómo crecen los lirios del campo: no trabajan ni hilan, 29 y aun así ni el mismo Salomón, con toda su gloria, se vistió como uno de ellos. 30 Pues si Dios viste así a la hierba, que hoy está en el campo y mañana se echa en el horno, ¿no hará mucho más por ustedes, hombres de poca fe?

Y me quedo aquí: ...Hombres de poca fe. Para añadir que su fe, también, se truncó en el Calvario, cuando vio que los putos romanos le iban a crucificar, por culpa de los putos judios religiosos.Si no por qué gritó Eli, Eli, ¿lama sabactani? Porque se dió perfecta cuenta que Juan y Él murieron esperando una mano del Padre Celestial. Y que por muchos ovnis y ovnináutas que bajaron para ver la faena... ninguno tuvo bemoles para interceder por el muchacho. Igual le pasó a Juan Bautista...; y la decepción creada entre todos aquellos seguidores de Juan y de Jesús. Y, posteriormente, a toda la raza humana que ha creido en el libro gordo de los papas. Y si aquello sucedió así, nos viene a quitar pesadumbre mental cuando con Su muerte es el destierro del Pecado Original, de los mortales hombres. Y que la muerte a cuchillo de los niños, la muerte de Juan Bautista y de Judas... es la inmolación por amor a Jesús.
El euroboros está cumplido. El principio y el fin se han juntado. El yin y el yan, se han completado.

Continúa el Sermón. Por lo tanto, no se preocupen ni se pregunten “¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos?” 32 Porque la gente anda tras todo esto, pero su Padre celestial sabe que ustedes tienen necesidad de todas estas cosas. 33 Por lo tanto, busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas.

34 »Así que, no se preocupen por el día de mañana, porque el día de mañana traerá sus propias preocupaciones. ¡Ya bastante tiene cada día con su propio mal!