al parecer, (hay más información en otro post), los extranjeros viajan a través del universo metidos en un cometa y con previsión de llegar a tierra y poder estirar las piernas; aunque sólo le pasa al radiotelegrafista el tenerse que quedar en la torre de control, mientras los demás amiguetes se pasean con el ovni por toda la superficie terrestre: mirando, abduciendo -con la consiguiente metida de mano bajo la falda y blusa, disculpándose después con el comandante por aquello del experimento con las terrícolas-; y mientras el otro cara al espacio y con dos largos de nariz, en cuanto al meter.
Bueno, la cuestión es que los grises vienen echando ostias hacia la Tierra... y yo me pregunto ¿entonces quienes son los que están aquí desde hace un porrón de años? ¡Pues no hay casi nadie! Algo anda mal en nuestros registros de nacimiento porque nada más y nada menos que hay 19 razas extra y no están registrados. Al menos José tuvo que registrar al niño Jesús (del que nacerían los jesuitas) echando chispas, y resulta que aquí (a la Tierra) viene la gente y no se apunta ni dios.
Pues -como veréis en el video- nos están mandando o saliendo del pedrusco que vuela raudo, unos sonidos por los que han echado mano de la discrección de Rajoy para que descifrara los pitidos. De aquí que el Pentágono americano le ha dado puerta a Rajoy porque es lento en eso de descifrar, hablar y comunicarse, y han tenido que echar mano de Zapatero que está hablando lo que no había hablado en su tiempo... pero tampoco ha gustado a Obama. Total que ahí están los de Podemos, con ese desparpajo que se usan, intentando llevarse el resultado del mensaje para sus posibles negociaciones con quienes tengan que gobernar con ellos, porque de gobernar gobiernan, aunque cierren los centros de ancianos abiertos por el Pp. Hasta los viejos engripados por la alcaldesa están pensando pasarse al aumento de pensiones que tiene prometido Pablo Iglesias. Aunque por el apellido no sé si no se quedarán -los viejos- a verlas venir, porque lo que se llama Iglesia, no dá ni los buenos días.
En fin, amigos, que fuera y dentro del panorama normal están pasando cosas que no nos dicen, ni llegamos a comprenderlas... de momento.
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