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dejábamos caer que no creíamos que Iñaqui Urdangarin estuviera viviendo como preso de penal. Sino que nunca había entrado en la prisión de Brieva; esa penitenciaría que está formada por gallinas de corral. Toda plagadita de mujeres al servicio del Pollo Pera. Con su piscina, su Jacuzzi, solárium, coctelería, y camareros de tanga...

Pues, amigos, no teníamos razón según la orden de excarcelación del nombrado personaje: el Pollo Pera...

En Brieva, todo el que va, (recordemos que ahí estuvo custodiado Roldan, Bárcenas) tiene un seguimiento de comportamiento cada seis meses. Dependiendo de si ha cubierto adecuadamente a las féminas, se le puede dar permiso de excarcelación diurna...

Nos han comunicado que Urdangarin no se ha portado bien y estará seis meses más en custodia penitenciaria. 
Ante esta contrariedad esperamos la presencia de Rahola, para que llore la decisión tomada por prisiones, tanto, como lloró la prohibición de salida al patio de Junqueras. Esta segunda prohibición fue por motivos de fuga mediante helicóptero, propiciada por una célula terrorista afincada en Barcelona. La célula al servicio de los independentistas y que se llevo por delante a determinados ciudadanos en las Ramblas. Junqueras se sintió saboteado. Junqueras sí que debería estar en Brieva. Hermano gemelo de Alain Delon.

Aún, así, contamos que le quedan dos telediarios para dejar la prisión e irse a vivir con sus hijos y esposa a Suiza. Cosa que nos cuesta una pasta el que este personaje y la muchacha, estén viviendo en el Cantón francés, con guardaespaldas a nuestra costa.

Lo que es evidente que gracias a su suegro se va a retirar para gastarse la pasta que recogía por medio del chantaje a los ayuntamientos de los amigos, y a la recogida de dinero público llegado a la ONG, Nóos, que llevaban entre manos. Si la Iglesia utiliza este método de recogida de pasta, porqué no lo podían utilizar la infanta y el futbolista. ¡Qué buenas personas!