lunes, 4 de septiembre de 2017

esta es la foto

Kim Jong-Un y Donald Trumpyo esperaba algo así. Esta es la foto del siglo XXI. Esta foto quedará en los anales de la historia como la imagen mejor tomada de dos especies -(en realidad es una)- a extinguir. Estos animales de bellota no volverán a nacer. La ingeniería genética no permitirá que semejantes especímenes controlen dos países, sin control mental. A excepción de que sean robot recreados por los intraterrenos, en el núcleo central del planeta. Porque ahí sí, que sí, pueden fundir la piel y órganos y células y núcleos celulares y todo lo preciso...: para robotizar semejantes iguales. ¿ A quién se le puede haber ocurrido darles unos joystick de guerra a dos intrusos descerebrados? "Quien siembra vientos recoge tempestades". Eso siempre pasa cuando energúmenos controlan los mandos de un país. Sin embargo, son los ciudadanos quienes padecen las siembras peor cosechadas. Ellos siempre consiguen estar lejos de los huracanes. En fin, que se están midiendo la masa encefálica y no se dan cuenta que no tienen ni para pasar el día; cuanto menos para un futuro cercano. Yo sigo pensando que Corea del Norte no tiene armamento para aguantar una guerra mundial. Está intentando medirse con los americanos porque eso es lo que le han pedido desde la Casa Blanca. Estados Unidos necesita tener siempre un enemigo a quien echarle la culpa de cualquier circunstancia que los americanos hayan creado. Rusia, Cuba, Siria, Sierra Leona... Todo para el Tío Sam es bueno para no sentirse acomplejado. Tiene que estar en todos los meollos porque necesita, aspira a ser el mando Imperialista, sentirse Cesar -junto con la Iglesia-, de los ejércitos romanos del mundo. Volver a repetir la historia una y otra vez.De este modo, la matrix no tiene fin y nadie puede salir de ella. Es una constante vibración caótico-demencial, sin salida o fisura energética.El mundo aspira a romper fronteras... pero no a romper la más importante, la que le mantiene reen de su propio pensamiento.

No hay comentarios: