sábado, 2 de noviembre de 2019

a escasos días de las votaciones

y los mangutas, distorsionadores de mensajes, acuden raudos a corroer la mente de los votantes: hartos ya de tanta comedura de tarro y tanto bueno desaparecido. 
Así se presentan algunos informándonos de que la derecha unida, suma una ultraderecha matona y cruel...
Me pregunto: ¿Qué representa la izquierda unida en Cataluña?, por ejemplo.
¿Qué esperamos de un Sánchez que recurre a la exhumación de Franco, y a la presidencia de España del Cambio Climático, cuando nadie ha querido apropiarse de semejante chorro de dinero perdido, como de infraestructura requerida?
Todo por llamar la atención para el 10-N. O, a no ser que se lo mandara Trump. Que todo podría ser.
Yo no creo en el cambio climático. En ese cambio climático que se abastece de dinero mundial que nadie sabe dónde va. De ese chorro de pasta que Sánchez ha dado a Estados Unidos como país subyugado al gobierno imperialista norteamericano. Un país que nos ha impuesto unos aranceles que no ha impuesto a nadie más. ¿Pues no pertenecemos a la OTAN? 
¿No les hemos tenido aquí toda la vida que tengo y recuerde?
No creo en el cambio climático del país del susto: EE.UU. Y no por ello me prodigo hijo de VOX. Ya sé que VOX tampoco hace migas con la divulgación de Al Gore, porque hay suficientes investigadores que niegan la mayor. Tal vez, tantos, como lo defienden.
No obstante sí vemos cómo nos lo quieren hacer creer cuando nos fumigan todos los días del año con unos polvos que nadie sabe ¿o sí? sobre nuestras cabezas. Chorros de polvo blanco que salen de los aviones preparados para ello. Y nos explican que esos chorros son la condensación del combustible quemado que sale por los motores. ¡Alucinante!
Lo peor de los mentirosos es que hacen de menos o de tontos, al resto. Y se destapan ellos solos al amparo de sus mentiras.
El Cambio Climático es una mentira gorda para recaudar dinero por cojones.

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