lunes, 3 de diciembre de 2018

todos somos Andalucía

menos, los separatistas catalanes, claro.
ES indudable que las presidencias tienen un poder insondable porque, si no fuera así, estoy seguro que al siguiente día de unas elecciones...: -no se disputarían la silla y... -ni la voluntad de los votantes.
A escasas horas de saber el escrutinio, los dirigentes políticos están viendo la forma de abordar el poder sin contar con las demás fuerzas más votadas. Es más, C`s, PP y Vox, se habían propuesto la disolución parcial o total del PSOE y, conseguido, se disputan la presidencia como lobos de camadas distintas. Más, aún, dispuestos a pactar con el PSOE, antes que con VOX, en el caso de PP y C`s. Cuando lo más sensato sería dejarse arrastrar por las urnas y no por pactos fratricidas o partidistas.
Visto desde fuera, la presencia de Podemos es la intrusión de un lobo de procedencia de los Cárpatos. Un vampiro al que no le importa el RH, positivo, negativo, o neutro, sino chupar la sangre de las víctimas todo el tiempo que sea necesario. Esto ya lo sabíamos, lo que no sabíamos es que el resto de participantes tienen las mismas ansias de libación que los podemitas.
¡Es tan asqueroso verles revolotear unos alrededor de los otros como si de dos púgiles, en cuadrilátero, se trataran!
Vuelvo a repetirme que no deben acoger las teorías de Orwel: de la mayoría rompe el esquema natural de las cosas, porque se hacen reos a quienes sus conocimientos y voluntades determinan que 2+2= a 4. No porque haya mayoría de descerebrados tiene que sumar 5. No porque haya una mayoría de locos hacen una locura buena. No podemos justificar que los robos ocasionados por el PSOE en Andalucía, durante cuarenta años, están justificados porque una mayoría les ha votado durante todo ese tiempo. 
Espero que la cordura haga de los participantes un partido que pueda gobernar Andalucía a beneficio de los andaluces. De ese modo es posible que el tripartito tenga una larga vida y mejor, cualificación. Sino, los andaluces les darán patada y, muy posiblemente, para muchos lustros.
Susana Díaz, tras la derrota.Adiós, Susanita, adiós. Han coreado los andaluces a cuarenta años de marujeo político, y de putiferios varios.
Espero que Griñán y Chaves devuelvan los dineros gastados en juergas, drogas, prostitución y a fondos perdidos de familiares y amigos. Que engrosen las cárceles como políticos presos, por sus malas praxis en el deber con los ciudadanos.

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