jueves, 20 de diciembre de 2018

a Sánchez le importamos un carajo

él tiene asumido que la presidencia es su negocio y la de su suegro. Y por ello intenta retener el Gobierno cueste lo que cueste y este cueste lo que cueste es lo que nos lleva a preguntarnos, ¿de qué se trata?
Pues ni más ni menos que cederles las competencias de las cárceles, en manos del Estado Central, a los etarras para que, los etarras presos por criminales y pertenencia a banda armada, salgan ilesos de su cáscara de presidio.
¿Por qué nos sorprende semejante dislate de este memo del carajo, cuando el otro memo del carajote de Zapatero -y con ayuda del PP-, les subieron a las alturas del gobierno del País Vasco y al miedo colectivo de sus habitantes?
¿A ver quién tiene huevos de hablar de política contraria a los etarras en sus feudos?
¡Aún a fecha de hoy!
Solo estas cosas son posibles gracias a los socialistos. Esos hombres Todo Poderosos que funcionan en Falcon desde su casa al curro y desde el curro a su casa.
Es de arcada embarazada. Que va desde la hora de levantarse de la cama hasta el medio día, y después...: todo el día.
Como bien sabemos los etarras eran los seminaristas que se escondían bajo las faldas de los curatos, obispos, cardenales y gente de mal vivir de la Iglesia, después de que ponían las bombas y mataban inocentes. Y les escondían por ser ellos -la curia- los causantes de señalar los objetivos a batir. Vergüenza, oiga. 

No hay comentarios: