...existe una élite que maneja los hilos de los títeres reales; éstos a su vez manejan a las marionetas y éstos, a los guiñoles; y por último está Luis Maria Ansón. Que dada su condición de emblema de la Razón: se despide de la audiencia en tv. haciendo el gesto con los dedos del rito masón escocés. Y es normal que, si los reyes son los pelotas de la alta clase dignataria del planeta, los periódistas alcancen con su cortesía, servilismo e imbecialidad, a la casta real de la que saca (digo yo) píngües beneficios, y de la que no paran de lamer el culo (que como escarabajo pelotero), necesitan de esa mierda que caga la realeza, para mantener su prole infesta en la pelotilla. Porque, señores, no hay mayor pelota que Luis María Ansón, cuando habla de la monarquía (guarra) que tenemos en España. Yo creo que no hace falta ser tan pelota y pedante en sus disertaciones sobre el Rey y su discurso propagandístico de gran preparación de Felipe para asumir la abdicación de su padre (cuando a éste le venga en gana). Y la verdad es que no está tan preparado como quieren hacer creer al pueblo. El principito es un pufo, es una estafa, una cagada manifiesta porque, por desgracia para él, lleva los genes que lleva; y viendo la choza, se conoce al pastor. Y es aquí donde entra en escena esa tan dispar diva de los disgustos de Jaime Peñafiel (otro que viste y calza por la discordia con la casta parasitaria en Zarzuela), que hace de maga con disfraz de princesa. Ésta y no otra, llevará la dirección del país, España, con ayuda de inversores allende los Pirineos, porque el esposo no sirve ni para taco de escopeta. Eso sí, está entre los elegidos bastardos reales, en asumir la dinastía del sol naciente. El anticristo.
¡Qué Dios, el verdadero, nos coja confesados!¡Qué curioso los colores de sus respectivos: azul, blanco, amarillo y rojo, del semáforo! Los colores de los Simpson.
El principe: azul oscuro sobre blanco y corbata azul claro.
Homer: pantalón azul claro sobre camisa blanca.
Leti: azul oscuro del sueter (como el azul del peinado de Marge), sobre blanco de la falda. Zapatos dorados: rayos de sol. La representa de Bart y Lisa. El rosa pálido, polvo de oro: antídoto de la juventud.
Debemos saber que: nada de lo que ocurre a nuestro alrededor obedece a la casualidad. Infinidad de mensajes surcan nuestros ojos sin que sepamos el significado, pero siempre hay alguien, en alguna parte, que recoge esos signos físicos y verbales, y traduce su contenido.
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