Escuchar a este personaje llamar vasallo de Trump a Feijóo... debe ser... como bien dice Abascal: una imagen que proyecta el espejo de sí mismo frente a los demás. Al presi se le ha olvidado la pleitesía, en tiempo real, que dedica a su amante moreno, el rey Mohamed VI. Es imposible que no haya atracción mutua cuando le regalamos los dineros españoles para que el monarca construya Marruecos que la tiene hecha unos zorros. Por eso vive en París a cuerpo de monarca, claro. Para ello, Sánchez, va a invertir unos 42.000 millones en dicho lugar. Para los españoles del campo y la ganadería no hay dinero pero... claro... el rey marroquí es el amor de su existencia. A tenor de este amor: ¿aquellos cinco días de reflexión fueron por culpa de Begoña o del nabo del monarca? ¡Ay, que momentos tan reflexivos le ha hecho pasar Mohamed! Se ha visto proyectado al cuento de la MIl y Una Noches y sentirse Sherezade, al lado de su ejecutor. Tan menesteroso enfoque tiene premisas de una tierna y pronunciada estancia en los harenes reales. Sánchez: su favorita.
y volviendo a las andadas de este galán de noche (me refiero al mueble o soporte de chaquetas en habitaciones) no se nos puede olvidar que vive de las construcciones de viviendas que nunca llegan. Ah, eso sí, lo tiene previsto desde hace décadas, pero que nunca llegan. Y para darle mayor y mejor realismo se funden en un abrazo patriótico nacional Sánchez y Rufián. Oh, que sintonía, que campanazo de fin de año tiene este encontronazo entre dos fatuos en mira oblicua. Qué perspicaz sequía existe entre ambos y que tienen que mal disimular la carga festivo-erótica de su sexualidad. Porque Rufián, amigos, no está en política por el dinero: no. Está en política porque le produce una sexualidad que fuera de ella no sería nadie. Sería uno más de los asexuados o pedófilos o abusones de mujeres. Una reliquia consumista de la casta socialista.
De manera distinta ¿qué sería de los periodistas si no existira Sánchez y sus múltiples casos de corrupción que dan vida a los medios que sin él estarían cerrando. Con él también cerrarán o lo intentará cerrarles la información que no le engorde el ego. A la marcha que van los medios de información escrita y visual el ego de Sánchez pegará un petardazo fallero que le pondrá en órbita alrededor del sol.
Espero que no tarden mucho en fundirle en ninot y pasearle en volandas como a la Macarena. Mientras le cantan la canción <<Ey Macarena>>: Los Del Rio.
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