La Junta Electoral Fallera

ha destituido de forma fulminante a Torra de la Generalidad. Es verdad que les ha costa (a la Junta) varios años y un asalto al tren del Estado Central, pero, por fin, han dado el paso correcto y han fulminado al pájaro de mal agüero. Han llegado a esa conclusión porque no andaba bien con sayas, sostenes y peineta de Dama de Elche. Era una birria mirarle  a la cara cuando caminaba con desgana y esa cara de arroz con leche. Le van a apuntar a las reuniones de CDRs y a quemas de banderas reales. Los chinos, piensan, se van a poner las botas de tantas banderas que van a necesitar con la mala leche que le debe de haber quedado momentos después de recibir el recado. Él que se encontraba tan contento y atolondrado como joven con novia..., se ha visto empañado y etiquetado como el novio en la boda sin novia que espera. Lo primero  que le han quitado ha sido las llaves de la puerta de la Generalidad por si le da por encerrarse y colgarse de la araña del techo. Que, para aquellos que la han visto, se han quedado mosqueados porque más que una araña parece una langosta gigante. Total, que ha tenido una tarda muy tarda y arrugá. Parece mentira que la Junta Electoral Fallera haya esperado hasta las fiestas para darle las fiesta. Eso no se hace a una persona tan amable con el pueblo llano y español. Aquellos bestias con forma... 

Me alegro tanto que La Junta Electoral Central le haya retirado la tarjeta de diputado. Espero que no fuera black. Porque se iría enseguida a Waterloo a llorarle a Puigdemont.

La última galletita del paquete se la han comido los de la Junta Electoral Central. Ya podéis tirar la caja. A la mierda el muy mierda de Torra. Espero, sinceramente, que el camino de Torra sea el mismo para Torrent. Hijos de la gran no necesitamos en Cataluña.