"A burro muerto, la cebada al rabo", dice un proberbio español y es que, cuando uno no se puede defender, del árbol caído, hacen leña. Y esto es lo que ha pasado con esta pobre mujer, cuya culpa era ser guapa y caer en manos de ese gran hermano MK Ultra llamado Holliwood. En los estudios Walt Disney la condicionaron psicológicamente, mediante escenas de dibujos animados al más puro estilo: Guantánamo, para que fuera un producto sexual para determinados cineastas, presidentes y escenas eróticas de tablaos privados de sectas vaticanas y satánicas varias. Que vengan a decirnos y nada menos que el FBI, que está metido en todos los fandangos más exabructos de la mafia y casta política de EEUU (siglas que siempre me suenan a susto o a que viene el coco), es para mear y no echar gota. Es decir, hay mucha niña mona que pasa por los estudios Disney y acaba siendo el muñeco de trapo de toda la política del momento, la iglesia, los Raniero, y al final la mafia la despacha, modus accidente: Grace Kelly, sobredosis de raticidas, o de productos varios,que se le ocurra a los sicarios contratados. A posteriori, y con estos comentarios, deberían arrestar a todos aquellos que quieran manchar la imagen de tan peculiar personaje.Ah, y para que veamos cuan mentiras nos dicen, que Frank Sinatra estuvo en ojos de Hoover, director del FBI, de aquel entonces. Frank Sinatra pertenecía a la mafia italiana y fue uno de los que dieron el beso de judas a los kénnedy ante de despacharlos. ¡Vivir para ver!
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