Al parecer el núcleo terrestre está intentando acoplarse al eje de la tierra. Sería algo así, como la sincronía en el calendario azteca, para señalar distintos grados y latitudes para determinar el paso del tiempo y en qué signo. Este año estamos en el año del conejo, según el calendario chino. Por ejemplo. Cada pueblo del mundo, ha ido marcando el tiempo conforme a las estrellas y las cosechas. De ahí los diferentes modos de apreciar la noche y el día, que marcaban las horas según el ojo avizor.
Si entendemos que los dinosaurios se extinguieron por culpa de un meteorito que chocó contra la Tierra, con el consabido cambio del eje... sería muy normal que con el tiempo, la Tierra, intentara volver a su estado antidiluviano, producto del [giro anómalo], [la presión del agua], y [la velocidad de rotación] sobre sí misma y alrededor de la estrella. No obstante, me cuesta pensar que todo este complejo sistema que tienen los planetas en su andadura y anclaje en el espacio estelar, sea tan fácil dislocar su estatus de un día para otro. Ya hay voces que nos informan de que cualquier cosa que pueda suceder en cuanto al núcleo y el eje... tardaría como 100.000 años. Y, después..., todos calvos.
Y como cuando sale una moda nueva todos nos enganchamos a ella. Están echando la culpa al cambio climático de Al Gore: expresidente de EEUU. El país que primero te llama, EE, para luego asustarte, UU.
Al menos, Al Gore, ha sabido vender su libro por todos los rincones del planeta.
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