lunes, 9 de enero de 2023

empezamos el año con buen pie

<<Mamacita, que me quede como estoy>>.
A nueve días de haber abandonado el 2022 y ya estamos empañados en que "si no es mejor este año, que se parezca al anterior". 
¿Pues no estábamos diciendo que el 2022 ha sido un año de perros callejeros, empaquetados al vacío?, ¿y es así como queremos seguir el rumbo del 2023? Porque todos los anuncios apuntan a que eso. Menos el guapo de nuestro presi que ha anunciado que va a ser un año de <<chupi dómine>>; vamos, de puta pena. Y todos tan contentos y tan felices de las noticias guays que nos traslada nuestro buen amigo y presi Sánchez. 
Bien...
Ha habido una novedad en el ambiente político que va a revolucionar el sistema bipartidista que veníamos teniendo hasta la fecha. La izquierda y la derecha se van a fusionar en un solo partido para colapsar todo el parlamento. Es decir:
desde la llegada de Feijóo como presidente del PP, se han dado cuenta, los zurdos y los diestros, que es mejor unificar la estructura de los dos partidos en uno. Y de esta forma se turnarán los presidentes cuando les de la gana sin tener que dar explicaciones a nadie. Es más, sería beneficioso porque de esta manera no tendríamos necesidad de votar... Cuando el gobierno viera que la gente está hasta las pelotas de verle en los medios diciendo gilipolleces... entonces sería el momento de cambiar de cara y gobernaría el contrario. ¿Contrarios? No habría contrarios. Vamos, como en la actualidad. 
El Psoe gobierna, y el PP le defiende de todos los males que le manda la población. Y, a la inversa; verbigracia. Todos tan contentos y que vayan pasando años que se parezcan al anterior. Porque de esta forma es admirable ver cómo los años pasan y seguimos igual. Nos damos cuenta que pasan porque somos un año más viejos... si no fuera así, ni nos daríamos cuenta de que el tiempo pasa como encefalograma plano de un muerto. Y es que los partidos nos han matado hace cuarenta años y no nos hemos dado cuenta. Nos han absorbido el seso y andamos como zombis por la calle, en el trabajo, y en todos los ámbitos de la vida cotidiana. Nos han quitado las ganas de vivir y nos la han suplantado con un móvil y un viaje a Benidorm. 
Todo lo demás es una carrera de obstáculos, un agobio constante y un pago continuado de lo que se definiría: beneficios para los ciudadanos. ¿Y dónde están los beneficios? 
Las calles de nuestras ciudades están llenas de porquería porque total para quien vive en ellas, bastante tienen o tenemos. Las aceras son castañuelas cuando pisas por ellas...: sí es verdad que cuando las están adoquinando parecen perfectas... pero...a los dos días están sueltos y castañean como bailadora en tablao.
Si no fuera porque nos roban a manos llenas y hay que volver a llenar la hucha, sería un sin vivir en nosotros. No sabríamos que hacer; no sabríamos ni disfrutar. Y, esto, gracias a Dios, es lo que venimos teniendo hasta el día de hoy, y lo que disfrutaremos. 
<<Mamita, que me quede como estoy>>
Feliz 2023.

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