viernes, 25 de noviembre de 2022

la verdad es un yunque

 

que aguanta la embestida del martillo. Y ni se queja, ni se resquebraja. En todo caso se queja con sonidos sordos, apagados. Pero haciendo honor al metal del que está hecho. Así debe ser el político que se precie y que pretenda sostener el metal de la espada que se ha de fraguar, como un Excalibur, en la conquista del reino donde mora el mal del pueblo. 
Todos los males se dan cita en las ciudades y pueblos. Porque anidan en el dolor que provocan a sus desgastados ciudadanos. Son carroña de la peor especie. Son déspotas y petulantes individuos que de tanto mirarse el ombligo se hacen cicatriz con la nariz, en el pecho. Asnos, diría, pero no pretendo dañar a ese noble animal que se enfrenta a lobos hambrientos. Solo espero, que VOX,  se enfrente a esos lobos con piel de oveja, que representa la izquierda. Hay que sacarles de España antes de que se instaure el comunismo de la China imperialista.

No hay comentarios: