No, Madrid ha sido protegida por la policía por los indicios que disponía de lo que podría pasar.
Lo patético es que en las cloacas se vendan armas, munición y demás objetos de matar por 4.000 euracos de mierda. Sin embargo tú tienes ganas de tirar al puto pichón y no encuentras a nadie que te venda el arsenal. ¿Quién vende las armas, entonces? Alguien muy allegado a ellas. Pues ahí es donde llega la pasma y demás individuos de mal vivir: las cloacas. Esas que las componen los mismos matones y la pasma. Si no ¿quién cojones? (Cuatro de los ocho guardias del puesto de Isla Mayor permitían la entrada de la droga al municipio por el Guadalquivir).
El caso es que aquí todo el mundo tiene un arma menos aquellos que deberían disponer de ellas. Los vigilantes de seguridad se encuentran en un mundo donde su cuerpo y espíritu lo anima ese pobre pichón al que todo el mundo intenta derribar. Éstos no precisan de armas: son unos descerebrados, según el sindicato policial. Ya disponen de cámaras para conocer el rostro de aquellos que les hayan matado. Sí, sí, indispensable las cámaras para ver cómo el yihadista te levanta el dedo corazón en señal de amistad. Menos mal que, todos aquellos que levantamos el dedo corazón, no pertecemos a ese atajo de amigos por la paz. Lo evidente es que el matón de Berlín o Niza no está entre los que iban a atentar en la Puerta del Sol. Hay en España más yihadistas sueltos que en toda Europa unida. No hace falta más que rondar las puertas de Mas y Puigdemont para saber dónde se dan cita todos estos hijos de p... Cataluña los está alimentando, paniaguando, para cuando las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado vayan a poner fin a ese ejambre de chorizos que se esconden en esa autonomía. ¡Que ya lo tenían que haber hecho! Pero el memo de Rajoy está esperando que decidan qué van a hacer y cuándo. ¡Ay! la masonería de Cataluña es muy dura, por mucho que alguien desde dentro del complot independentista masón, niegue la mayor.
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