martes, 7 de octubre de 2014

nave de 600 x 100 metros

llamada Solar Warden, está orbitando la Tierra en un ciclo perigeo y de rotación, creando un campo de atraccion interno parecido al que tiene el planeta. La antigravedad es aquella que mantiene a la nave a una distancia idónea, para que naves más pequeñas puedan ir acumulando víveres en su interior. Al parecer, y me lo puedo creer, que dicha nave está preparada para albergar a 300 personas, de las que la mayoría serían los poderosos. No me extraña este complejo sistema de escaqueo porque sino porqué de la globalización. Una de las maneras más eficaces de genocidio por medio de una pandemia, como el ébola, para que después puedan bajar sin que haya consecuencias graves sobre el planeta. Algo tan grave como otro Diluvio Universal, que no fue otra cosa que restaurar el ecosistema mundial por la radiacción de numerosas bombas atómicas. Bombas que dejaron el planeta sumido en el caos, por llamarlo de alguna forma, y cuyos habitantes tuvieron que emigrar a saber Dios que lugares extra planetarios. Ahora nos toca a nosotros repetir la misma odisea que hiciera Ulises, por los confines del Universo. Lo malo es que no son Ulises los componentes de las naves anti gravedad, sino individuos malvados y de poco cerebro los que pueden ocupar otro u otros planetas, para hacer lo mismo que con éste. La verdad, nunca pensé que los malos o malvados pudieran conquistar el espacio sideral. Más bien creí en un Ente sobrenatural el que mantuviera un equilibrio natural de las cosas. Tal vez me equivoqué, al darle un valor X a la energía creadora del Todo.
aquí una copia extraída de documentos secretos de los militares de Estados Unidos:
Todos los programas espaciales son un escaparate para ocultar a la gente el verdadero. Contamos con una flota espacial cuyo nombre en clave es Solar Warden. Había en 2005 ocho naves nodrizas, equiparables a portaaviones, y 43 naves protectoras equiparables a aviones caza.
Inventos que nos hablan de hace 30 años. Y que muchos de ellos serían fabricados en suelo alemán. Las empress Thule y Vril, fueron las encargadas de administrar y conseguir el material necesario para este tipo de experimento. Hasta tal punto que los ingenieros eran reclutadosy excluidos de la sociedad por tiempo indefinido; de normal, hasta el probado de los prototipos experimentales.
No podemos, por tanto, negar la existencia de esta tecnología que ya experimentara el ingeniero Nicola Tesla. Hablamos de la energía anti-gravedad y energía interna de la Tierra, con propiedades inimaginables para el común de los mortales. Una de las bobinas que diseñó Tesla, abastecería a los terrestres de la energía lumínica inacabable y gratuita. A los poderosos no les interesó dicho progreso, progreso que ahora utilizan una vez asesinado el inventor. ¡Qué gracia, ¿no?!

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