jueves, 31 de julio de 2014

es muy difícil

que entre dos personas del mismo sexo que les gusta les penetren y no penetrar... es muy dificil -digo- lleguen a un acuerdo a no ser que, el acuerdo, esté ya resuelto de ante mano. ¿Por quién? Por su majestad Felipe VI. ¿Por qué lo digo? Porque la Reina (Leti) viste de blanco y en España, el blanco, es señal de matrimonio. No me cabría en cabeza que Rajoy llegara a un entendimiento en las camas reales dejando, finalizado el embite sexual, el uno la renuncia a su erre que erre autonomico y el otro, los aumentos que recibirá por tan bajada de panti. Y cada uno, con sorpresa, dejando sus propuestas sobre la mesita de noche del contrario. Es verdad que Mas ha salido de la habitación comunicando lo bruto, rebruto y asno, que puede llegar a ser Rajoy en su también erre que erre en que la Constitución, no le permite llegar a hacer lo que el republicano quiere llegar a hacer; y es por ello que Mas siempre dice que Rajoy no propone nada sobre Caraluña, porque no le da o face razón separatista. 
¡Lo que es el amor! Aunque haya facciones que nos quieran hacer creer que entre Mas y Rajoy hay frialdad personal. Ellos saben muy bien en qué momentos del día ser fríos, y en qué momentos de la noche: calurosos. Que para eso hay termostatos ambientales, para arrancarse las ropas.
No, no hay rechazo entre estos personajes de la política, porque el Rey abdicado ya, en su día, preparó los medios adecuados para que los catalanes fueran invencibles e intocables. Ahora, eso sí, a la hora de llevar la contraria a la Constitución española... va un abismo.

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