es impresionante escuchar la cantidad de chorizos y chorizadas que nos hacen sus señorías, por propias bocas, y no les cae la cara de vergüenza. Pero tampoco se les cae la cara por la cantidad de mentiras que lanzan para opacar sus actos ilícitos como robos de cuantiosas cantidades... mientras los ciudadanos lo están pasando realmente mal. Sin duda, la mentira, tiene nombre de Pedro Sánchez.
Las fuerzas y cuerpos del Estado están colapsados entre las investigaciones a diputados y la inseguridad, en las calles de pueblos y ciudades, por culpa de una emigración ilegal y delictiva.
Una emigración con premisas de agresiones a mujeres y ancianos, y violencia sexual a jóvenes. Terminaremos por tomarnos la justicia por nuestras manos y mandar los restos que queden en las mismas pateras con las que vinieron esos indeseables hijos de... Esta gentuza son guarros, están por civilizar, y por ello les lanzan al mar para que Dios escoja entre los salvados y los ejecutados. No sin echar la culpa a los países de acogida, si los ejecutados divinos quedan en el camino. ¿Quedan en conciencia de papás y gobierno que sus hijos se pueden quedar varados en plena mar y a voluntad del oleaje? Pues parece ser que sí y a ninguno de los dos les preocupa las consecuencias de su bravata. Creo que todos piensan en las oenegé salvadoras y éstas, no siempre llegan a tiempo del salvamento. ¡Qué historia la de este siglo! Siempre nos quedará París.
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