lunes, 24 de julio de 2023

hablando de pirámides

 
¿Quiénes fueron nuestros antepasados? ¿Quiénes pudieron, a base de piedras, construir esas fabulosas pirámides que nos absorben nuestra conciencia al borde de la locura? ¿Para qué fueron construidas si en realidad nadie las habitó ni poseyó en muerte?
Si después de 20.000 años no somos capaces de imitar ni siquiera a un dolmen... ¿cómo consiguieron posicionar bloque sobre bloque con tantísimo peso y sin una grúa que llevarse a la boca?
También es curioso saber que existen, según latitud, pirámides de construcción distinta. Algo así, como si a la Tierra hubieran bajado diferentes especímenes de humanos, con las herramientas de corte y perforación, adecuadas para ello. Pero ¿izarlas? 
El caso es que sobre la superficie hay todo un enjambre de [ellas], y bajo las aguas... también. La pena es que nos estamos acostumbrando a vivir en su presencia, y se nos está terminando el deseo de saber más sobre sus hacedores.
Me ha fascinado de siempre su presencia y lo hermoso de su voluminoso lego. Nada más hermoso hecho por la mano de (¿humanos?) Tal vez, dentro de poco, mientras van sacando la arena que cubre Egipto, salgan pergaminos que nos expliquen el cómo y el por qué de sus construcciones.
Por favor
que sea pronto porque cuando la edad viene a cubrir la juventud... la prestanza es necesaria.
Acaso no es divino tener en las manos algo creado y no saber por qué o por quién.
¡Que grande y sublime todo cuanto nos rodea y, más, cuando no sabemos su utilización!
Quizá en mi próxima reencarnación sepa la incógnita que me tuvo toda la vida en un ay.

No hay comentarios: