Estimado amigo:
La excepcional situación provocada por la pandemia de COVID-19 motivó que el Consejo de Ministros de 22 de Septiembre decidiera la cancelación definitiva de la temporada 2020/21 del programa de Turismo Social del IMSERSO.
Este programa, configurado desde 1985 como prestación complementaria del Sistema de Seguridad Social, tiene como finalidad primordial la promoción de la salud y del envejecimiento activo complementándose a la perfección con el fomento de la actividad turística y el mantenimiento del empleo en el sector.
La primera interrupción del programa ya se produjo en marzo de este año (medida que se adoptó incluso antes de la declaración del estado de alarma el día 14) y se prorrogó posteriormente hasta el 30 de junio. Tras esa fecha hemos analizado de manera minuciosa el curso de la epidemia de COVID-19 con la esperanza de que apareciera una ventana de normalidad que permitiera la reanudación de las actividades con suficiente seguridad.
Lamentablemente no ha sido así.
Sé que Ud. comprende sobradamente que, junto a los evidentes beneficios que reportan estos programas para las personas mayores, hemos tenido que sopesar criterios obvios de preservación de la integridad de las personas junto con factores de salud pública. La perspectiva de la puesta en marcha de una actividad que comporta cientos de mieles de desplazamientos de personas de todas las procedencias que por su edad es sabido que presentan mayor vulnerabilidad a la enfermedad COVID-19, en un contexto epidémico sin precedentes y plagado aún de incertidumbres, impide -desde la más honesta responsabilidad- la realización del programa en estos momentos.
La cancelación de esta temporada 2020/2021 de turismo social implica que su reanudación habrá de preverse avanzado el año 2021, en cuanto la situación de la pandemia lo permita. Desde este mismo momento, el IMSERSO ya estamos trabajando para reconfigurar en lo que sea necesario el diseño del programa de forma que se reinicie cuanto antes en lo que será una vuelta gradual y con todas las medidas de seguridad.
Estamos convencidos de que todas las personas destinatarias de este programa comprenden perfectamente lo razonable de esta decisión, así como también lo estamos de que la pandemia acabará siendo vencida gracias a la unidad, el compromiso, la colaboración y la responsabilidad de toda la ciudadanía. Algo de lo que en estos meses ha hecho gala muy especialmente en el colectivo de personas mayores.
Espero fervientemente poder darle cuanto antes la buena noticia de la reanudación del programa de Turismo del IMSERSO. Significará que hemos superado la situación.
Hasta entonces, cuídese y reciba mi más cordial saludo.
Luis Alberto Barriga Martín
Director General.
Agradezcamos al Ministerio la cordialidad con la que nos ha hecho partícipes del fenómeno por el que no ha sido/ni será, posible, la facultad de poder ocupar los hoteles por estar ocupados por los migrantes.
Si con el desalojo migrante tienen que poner en cuarentena -otra vez- todos los hoteles, está claro que hasta el 2022, como mínimo, no habrá forma de viajar. Todo sea por ver contentos a los presidentes de gobierno de los distintos países de donde proceden estos señores de cayuco motorizado, móviles de último modelo, y la dirección de Cáritas para pedir los derechos de manutención, vivienda, ropa y paguita. Y a ser posible que la vivienda sea de patada en la puerta y ocupación; porque así cabe toda la familia y amigos.
Bienvenidos, amigos migrantes, rezaba una pancarta de Oramas en las Islas Canarias. Hoy ya no existe la pancarta porque Oramas ha reculado al recibir 17.000 migrantes en un lugar donde caben 200. Ahora ha pedido al gobierno central la repatriación de todos los que vean por las calles con las manos en los bolsillos, tenga pinta de pollo pera y caradura múltiple.
Todos estos individuos emigran por voluntad de sus gobernantes porque así se evitan tener que darles de comer a la vez que no hay donde trabajar. Nosotros no les damos trabajo pero, sí manutención y vivienda gratis. Y si no pueden pagar la luz, el agua o el gas, se les paga también.
Así ya se puede ser mandatario de un país. Me nos, en los países buenistas como los que conforman la Unión Europea. Aunque, la presidenta Merkel, también tuvo que dar marcha atrás, como Oramas, en la recepción tan positiva que tuvo la llamada buenista.
Menudos memos del carajo tenemos de mandatarios políticos.
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