de la Tierra al Cielo.

A esto es a lo que está llegando la mentalidad de las gentes. El mundo está desarrollando su nivel de comprensión sobre todo lo que nos rodea y es, de esta manera, que el mundo seguirá siendo mundo, muy a pesar de los propósitos de algunos pocos individuos del planeta. Es difícil romper o rasgar la tela del templo, del gran templo que somos los humanos, pero lo estamos consiguiendo a base de obtener la información y el deseo de llevarlo a cabo. Jesús, -el de la Historia-, tuvo en su mente y en su camino, el romper el velo, y lo consiguió a base de tesón y sacrificio. Y quedó impreso que, si queríamos liberarnos de la esclavitud, que nos imponen otros individuos... tiene que ser a base de abrir los ojos y enfrentarnos a los esclavos que hacen esclavos.¡Pero está tan arraigado el velo! que es difícil abrir los párpados y ver la realidad. Es necesario desear no ser borrego. Es necesario componer nuevas formas y formatos objetivos. Es necesario no recurrir a los viejos tópicos para componer nuevos sistemas que nos llevarían a los mismos errores. Es necesario no pensar de puertas a dentro y ser visible a través de las rendijas del Templo.