se emborracha contra los musulmanes.
Ha declarado que piensa cerrar las puertas a todos aquellos que no viven más..., que para la yihad. Terroristas de facto, cuyo odio se revierte para matar a gente.
Y, Trump, -piensa-, y, -lo hará con causa justificada e investigaciones de la CIA-, que a esa gente ni agua. Y que cuanto más lejos mejor. Al menos no les niega su derecho a permanecer en su país matándose o lapidándose si así lo desean.
Ante este acopio de fuera y valor que resucita la empatía por la vida en familia y en paz...;
se ha envarado la ganadora del premio Nobel de la Paz, la joven pakistaní, al enviarle a Trump las siguientes frases:
--Es realmente terrible oír tales declaraciones llenas de odio, ideologías y discriminación.
--Es importante que, digan lo que digan los políticos, y digan lo que digan los medios, sean muy muy cuidadosos.
--Si tu intención es parar el terrorismo, no eches la culpa a toda la población musulmana. Porque así no se acaba con el terrorismo, sino que se radicaliza a más terroristas"
declaró Malala a AFP.
--"Sería una profunda injusticia que se asociase a 1,6 millones de musulmanes con un puñado de organizaciones terroristas".
Lo dice quien esta asesorada, mega preparada en su condición de agente secreto para la misma CIA.
¡Qué grandes son estos psicoanalistas de la mente americanos!
Consiguen de una colgada pakistaní una fémina al servicio del enemigo.
Malala una mujer bajo la sombra de un satén de seda.
Mandela, Malala, Gandhi, Luther King, y todos aquellos que han tenido personalidad para ganarse las simpatías de las gentes y manipularlas a beneficio del enemigo... han trabajado para la fuerzas de la CIA. Agentes dobles.
¡La grey no prospera porque somos incapaces de ver lo que hay delante de las sombras que se mueven en la caverna!
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