lunes, 2 de diciembre de 2013

Miguel Ricart

fue una mano negra que utilizaron otros del poder para llevar a término sus rituales satánicos (todo lo que conlleva asesinato, lo considero ritual). Y estas niñas fueron utilizadas como a otras muchas que desaparecen anualmente para fechorías macabras y orgías sexuales políticas. La mayor parte de las niñas y niños son reclutados en grandes festivales, macrofiestas satánicas, para ser después desechados o despeñados en tremendos accidentes de coche o drogas. Y no contentos de tan tremendos asesinatos, se les hacen vídeos snuff para regodearse de sus hazañas maléficas, en posteriores reuniones.
 Es verdad que este individuo ha estado su tiempo en la cárcel, pero no concibo que el otro se haya evaporado sin dejar rastro. 
Lo evidente del caso es, que los culpables de semejante asesinato no están y estarán en el trullo, de donde nunca deberían salir. Y es que la política está hecha para todo este tipo de majadero donde, ahora, les ha dado por matar gente en rituales a modo de vampiros. Ya algún que otro presidente de Estados D´esunidos, le dió por soltar hombres y mujeres para darles caza después. ¿Es película? Sí. Pero sacada de la realidad. Otro snuff filmado por Hollywood para hacer creer a los cinéfilos que esto es ficción, cuando detrás se esconde la más cruda realidad.
Nos gobiernan hombres y mujeres que son estúpidos, subyugados a banalidades múltiples, y rituales escogidos. El mundo lo están utilizando para crear un Ente diabólico que nunca ha existido. Es posible que con el tiempo esa idea mental, acompañada de tanto ritual sangriento, consigan materializar un ser o humo ,que obedezca a las pasiones de estos desnaturalizados. Tal vez Aleister Crowlei ( de la secta Golden Dawn) esté en ello.

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