jueves, 5 de diciembre de 2013

¡No lo puedo creer...

 Que el Papa Franc haya sido portero de discoteca y Barack Obama vendedor de helados***. Está claro que por ser... aquí cada uno pudo haber sido lo que quiera por aquello de... el problema es, cuando tienes que hacerlo por obligada devoción para poder comer. Hombre, que Obama diga que trabajó de vendedor de helados, no creo que fuera por una gran obligación de llenar el buche, sabiendo que ha llegado al poder a través de la casta parasitaria norteamericana. En esta foto podemos verle en el árbol genealógico de los Buhs, a quienes abríamos de preguntarle de cuántas negras esclavas se cepillaron, por los terrenos de pantanos y plantaciones, para que saliera este negro entre tanto blanco. Es decir, no creo que Obama llegara de vender helados a presidente de Estados Unidos. Aunque cosas más curiosas sí hay por ejemplo, nuestro presi el Corto (de nombre: Mariano), pasó de limpiador de escaleras a tomar la Moncloa. Y qué decir de Franc. Ya le veíamos algo espiritoso, que no espirituoso, con las putas italianas a las que, como ya dijimos, visita de noche para darles las gracias por sus aportaciones a la comunidad febril y eclesiástica. Porque no olvidemos que la mayoría de los cardenales, obispos y demás cucarachas tienen sus burdeles para meter... y no solo la ostia.
Y al igual que dijo Hermes Trimegistro: lo que es arriba es abajo; Franc, intuyendo que algún día iba a ser Papa, emuló a san Pedro. Pedro portero del Cielo, Franc portero de discoteca. Y desde este enclave cercano a la juventud se le oyó decir: dejad que los niños se acerquen a mí, porque detrás vendrán las mamás.

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