menos mal

 

que cada tiempo, época, se ha visto como en la Tierra se ha venido completando la evolución de las especies y con ellas, han aparecido estos personajes que pueden dar sencillas clases del comportamiento adecuado, que no específico, de cómo deben comportarse la pareja de cada especie. Tan es así que la mamá de las susodichas no les deben de haber informado de cómo se multiplican las especies y siguen compensando el desfase..., con la llegada de una cigüeña portadora de bebés franchutes. Por tal motivo, en la última camada, han venido acompañadas de un prospecto para las próximas generaciones. Y, es, esa enseñanza, las que están desarrollando estas muchachas entrenadas en decir idioteces. No solamente lo concerniente a las necesidades normales del comportamiento animal... si no de la inoperante capacidad craneal de la especie dominante. Hasta el habla de las dominantes ha sido configurada para la comprensión de futuras especies con capacidad de habla. ¡Alucinante! Nosotres, elles... un vocabulario que supera con creces el habla normal que se ha desarrollado de siglos atrás. Es normal, al parecer, romper la rutina e, intentar, introducir nuevos sonetos a la regularidad del lenguaje. Un idioma nuevo cambiando el final de las palabras. Un portento de la clase alta y de la iluminación del diccionario. No hay más que dejarles llegar si es que van a algún sitio.