martes, 12 de abril de 2022

Maestros de nada...

 un fisonomista nos diría que el parecido entre Joe Biden y Feijóo es considerable; si no entendiéramos que Biden es un poco homosexual y un poco pedófilo, y Feijóo, no se sabe. 
En estos momentos -dicen-: que es un poco narco. Pero, claro, lo dice la izquierda por no meterse contra su presidente de partido, el memo Sánchez, que también se parece a Biden, por el estiramiento del cuello jirafa que hace en público.
Pero, a saber... que tienen otros parecidos en el lenguaje: 
Joe habla como un señor de los años que tiene y alguna deficiencia de frenillo. Feijóo es igual que Biden pero en el manejo del castellano, por ese deje gallego paleto, pero con frenillo. Ambos hablan igual de mal. A Joe le ha sentado repugnantemente coger la presidencia [del país del susto] EEUU. Y a Feijóo le sentó mal coger la presidencia del PP nacional, porque, le hizo un poco gilipollas, virando a la izquierda. Le torció la columna hacia su brazo zurdo. Él, que se había entendido (ahí posiblemente su bisexualidad. Ojo: no digo que lo sea) tantos años con los sindicatos, nos deja entrever algo parecido. Que... ─mirando la cara de los sindicalistas─... 
─es para haberse guardado esas insinuaciones... ─Deben pertenecer a la Liga de los Muertos Vivientes, en vez de a CCOO y UGT.

Total, que,
quiere aparentar dotes de señorío y resulta que tiene a su derecha a Ayuso que le <<da sopas con honda.>> Al menos hay alguien del PP que sabe contra quién está, para no dejarse ningunear. Y es que no se puede estar a <<las duras y a las maduras>> con [el] Antonio Sánchez. Un (bautismo pseudoreligioso), a la trasera del Vaticano. Se nos ha hecho, junto con el papa Franc, de La Liga de los Oscuros, de ahí su cambio de nombre. De Pedro a Antonio. No le quieren ni en el Vaticano,  por aquella referencia de: Pedro, sobre esa piedra edificaré... Pues eso. 
Estos siniestros personajes nos están haciendo nadar en la mierda, desde que nos levantamos hasta que nos acostamos. Luego, no tienen más que echar la culpa a la guerra, a la pandemia, a que respiramos y nos tiramos pedos que engrosa el ozono y, con ello, cooperamos al cambio climático. <<Memos hasta almorzar, y después todo el día>>: que dijera el flamante FJL.

El General de la Compañía de Jesús, Arturo Sosa, nos invita a la acción Laudato Sí, que no es otra cosa que intentar cuidar el planeta: 
<<No consumir mucho.>> 
<<Decirnos que no somos Dios.>> 
En contra del parecer de todos aquellos que Sí lo pensamos, por la misma razón que llevamos Su naturaleza divina. El Soplo Divino. Y porque en el Génesis reza: <<Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios los creó.>> No podemos pensar que, con estos antecedentes, no seamos hermanos de Jesús e hijos de Dios. Todo un logro divino en contra de aquellos que nos quieren de las huestes luciferinas. Negamos su existencia por mucho que nos quieran hacer creer que somos luciferinos por habitar el planeta donde fue arrojado Lucifer. Creemos que a este ser "Divino", le están dando cuerpo y alma aquellos que en su interior solo tienen odio contra la humanidad. Aquellos que no les tiembla la mano cuando tienen que hacerse ofrendas de sangre de niños o niñas vírgenes. Esos malogrados mentales, carne de siquiatra. Estos Sí que están fuera de toda Naturaleza de ser. Seres perdidos dentro del mal endémico que habita en su interior. Pero... como dijera Jesús: "Estaís abocados a amar". Porque el mal no es más que la rebaja de amor. Pero No la falta total de amor. Nadie consigue la falta Total de amor. Y, por tanto, la chispa que perdura es suficiente para no olvidar a Quién perteneces. Abocados Todos a elevar nuestra vibración a la presencia de Dios. Todo sea por hacer visible la presencia de Dios. La ausencia del mal de nuestros actos y pensamientos. La restauración del bien en todos los estadíos de la mente, por la presencia del Espíritu Santo que mora en nosotros. 

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