filosofía del satanismo

contrariamente a lo que se podría pensar, el ejército de Satán no cree en la existencia del Diablo. Los miembros de la organización son ateos. Para ellos el Diablo no es más que la representación arquetípica de la verdadera natualeza del ser humano. Esta Iglesia pretende librar a sus miembros del sentimiento de culpa impuesto por la Iglesia Católica. Por tanto, el verdadero satanista, no debe sentirse culpable por odiar a sus enemigos, pues eso es lo normal. A diferencia de lo que defiende la fe cristiana.Un satanista nunca debe poner la otra mejillla, y no tiene complejo en sentir4se gratificado por su triunfo en la vida, disfrutando libremente del dinero, el sexo, la lujuria y el poder Por tanto, el deber de todo hombre consiste en crear su propio paraíso en la Tierra, porque no existe más realidad que la material.

El creador de la Iglesia de Satán, odiaba a los comunistas y socialistas porque, según su particular visión, estas ideologías parten de la filosofia cristiana que pretende igualar a los seres humanos. Para el lider los hombres no son iguales. Aseguraba: "hay personas que por sus capacidades, inteligencia y tesón merecen llegar a lo más alto, dirigir al resto de la sociedad; y otros sólo merecen pertenecer a la manada, a la masa. Un satanista siempre aspira a dirigir a la manada.

Para los satanistas la vida es competencia y sólo triunfan los más aptos, por eso no creen en la compasión ni en el amor universal, sino en la fortaleza del espíritu y en amar sólo a aquellos que se merecen nuestro aprecio, odiando sin complejos a los que se merecen nuestro odio. "No se puede amar incondicionalmente, eso no es más que otra mentira del decadente cristianismo. El ejército de Satán exige a sus seguidores que se amen a sí mismos por encima de todo y que desarrollen su ego e importancia personal.Esto en cuanto a la filosofía de satanista. En El Evangelio de las Tinieblas puede leerse: "Los siete pecados de la Iglesia cristiana son: avaricia, orgullo, envidia, ira, gula, lujuria y pereza. El satanismo aconseja la práctica de cada uno de estos pecados, pues todos ellos son beneficiosos para el ser humano". 

Los seres humanos hemos inventado las religiones porque tenemos ego e instintos; y como nos negamos a aceptarlos, hemos tenido que exteriorizarlos en una gran invención espiritual a la que llamamos Dios o dioses. La realidad es que Dios puede hacer todo lo que a los humanos les está vedado: matar personas; mostrar un carácter vengativo; controlar la voluntad de los hombres; imponer reglas, erigiéndose en lider absoluto; etc. Estamos exteriorizando en la figura inalcanzable de Dios todo aquello que nos gustaría hacer. En otras palabras, los humanos adoramos a la naturaleza carnal de todo ser humano. La representación del Diablo es una representación animal del Hombre. Es habitual que lo encontremos representado con claros atributos animales: cola, cuernos, pezuñas... Pan simbolizaba la abundancia, la fertilidad y la fecundidad; es decir, todo aquello contrario al cristianismo.

¿No recuerda la filosofia satánica a la ideología del capitalismo salvaje o neoliberalismo? ¿No nos recuerda a la segunda tabla de la Ley de Moisés en su manifestación negativa, dirigida a los empresarios y reyes e iglesias?

El Falso evangelio de Satanás

“Como tener éxito”, “ámate a ti mismo”, “su mejor vida ahora”, “lo mejor de ti” son los títulos de los best seller entre el mercado cristiano de toda américa. Estos pensamiento no solo son contrario a la verdad si no que son pensamientos satánico. Bíblicamente este es un mensaje promovido por satanás. Un mensaje aceptado por muchos cristianos porque han vendido la verdad. La moda en los pulpitos modernos es predicar como el hombre puede ser mejor. La sana doctrina ya no es atractiva, para muchos es anticuada. El mensaje humanista ha sido tomado como una “buena noticia”. Por eso le llamo otro “evangelio” que satanás busca poner en las mentes de los cristianos.

Esta filosofía que ha invadido los pulpitos buscando que el hombre se centre en sí mismo es el falso evangelio de satanás. Algunos pensaran, ¿No será una frase muy extremista? ¿No cree que esté exagerando? La respuesta es un rotundo no.