tendremos la misma policía estatal que en el resto de los mundos allende los Pirineos y mares. Es decir, una policía al servicio de las mafias, resultando ser una mafia, y trapicheando -que es Gerundio- con la prostitución, la droga y venta de armas. Se nos van a convertir en Mossos, con lo que eso conlleva.
Los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado nunca han podido hacer huelga y menos ausentarse del servicio. Ahora resulta que pueden amotinarse contra el Estado Central (como lo han hecho los Mossos en Cataluña) y encima, solicitar la equiparación de suelto con relación a éstos.
Señores
lo que tendría que hacer el Ministro de Interior es rebajarles el suelto a los Mosos, equiparándoselo a los policías estales.
¿Por qué hay que equipararles el sueldo a una policía autónoma que no cumple los requisitos de agentes de autoridad como corresponde? ¿Cómo habríamos de conceptuarles a los Mossos por la función disfuncional que padecen? ¿Cómo podríamos conceptuar al Ministro del Interior que no sabe o no quiere hacerse cargo de los funcionarios que están al servicio de la Nación? ¿Pero qué ornada de ministros tenemos que, juntos, no llegan a mitad de mes mental? ¿Podemos los españoles pagar a semejante escombrera de ministros y funcionarios que no funcionan? ¿Puede España tener la misma disfunción pública que Venezuela? Si se presenta Maduro...: mi voto lo tiene. Al menos, éste, no tiene que disimular lo impresentable que es. Los de aquí, aún, pretenden engañarnos por su porte distinguido y corte prêt-à-porter: lencería Corte Inglés.
Desde este espacio ya dejamos claro lo que pensábamos de la subida a los policías y ahora, después de haberse comprometido con ellos y de que saben no hay dinero para tal subida, los agentes se amotinan contra la mentira falaz de un gobierno de Rajoy y ahora, del de Sánchez. Sería conveniente hacer pagar todos estos desajustes monetarios a aquellos políticos catalanes que han sido causa y efecto de la presencia policial en el lugar de autos. En el lugar del Golpe al Estado español. Intervenir la Comunidad y hacer pagar, con sus sueldos, los perniciosos sucesos que fueron la causa de la presencia policial. Unos agentes que han tenido que padecer de todo tipo de abuso de autoridad ministerial, presidencial, e insultos varios de la grey independentista. ¿Y cuál ha sido el resultado de la intervención policial? Una sarta de órdenes sin fundamento; un cúmulo de errores para la imagen de la policía: el Piolín. El desprecio nauseabundo, por parte de hoteles, a no darles habitación; y el desamparo del Ministro Pazguato, en proveerles de sustento y amparo en el territorio que es de su competencia.
Tanto el Ministro de Interior, como el mando militar, que se les asignó, dejaron mucho que desear a la hora de dirigir la operación: "Trueno del Desierto Catalán". Erial dejado por el éxodo de empresas que desaparecieron de Cataluña.
Espero, al menos, que los políticos presos tengan su paga en tiempo carcelario. Y que, aquellos, que están con ellos y presumen de ello, también tengan su tiempo de gloria en la trena. Me encantaría -tanto como a él- que Rufián tuviera o tuviese su momento de gloria carcelaria. Esa privación de libertad sería constructiva para la mente podrida que tiene semejante espécimen. Un individuo que está enajenado con sigo mismo por su amor a una ideología trasnochada. Le asentaría la mente un tiempecito con sus acólitos de partido y demás membrillos indepen...day.
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