Y, con el covid-19, les ha bajado Dios a ver. Sí... ese Dios amigo del argentino Francisco. Sólo por eso me doy de baja de la Iglesia que representa. Creo que Dios hizo a los argentinos la casta vaga de las generaciones de los no trabajadores pero... sí cobradores para subsistir. Amén de una idiotez extrema a la hora de hablar, de manifestar dotes que no tienen, como Francisco. Y si no que se lo pregunten a sus charlatanes amigos de misa y alzacuello. Creo que van a hacerle una huelga de sotanas caídas y calzón con elefantitos: las trompas empinadas.
Mira que la iglesia venía de capa caída desde los abusos a menores. Que las denuncias a la ONU no limpio sus miserables actos, ni pagando los abusos con millones de euros. La gente le está dando la espalda al Blanco Ariel, hasta cuando hace exorcismo -en la calle- a pobres minusválidos en sus sillas de ruedas. Eso, sí, los besos en la boca no se los priva nadie.
Pues allá que se ha ido Sánchez, a ver al Papa, en compañía del pecaminoso Iglesias para probar si Francisco le perdona haberse metido contra él en algunas ocasiones, hasta que le conoció y reconoció que era un tío muy inteligente y admirable persona. Una de cal y otra de arena, amigo Sánchez. Así es como se hace política: doblando los pros y contras para estar a la altura de cualquier ciudadano que tenga la mala baba de investigar los manejos degenerativos del vicepresidente segundo de gobierno. Pronto si la viceministra primera de Sánchez no cambia de careto... el vicepresidente segundo, será primero, en pocos días. Carmen Calvo tiene lo justo para morderse y aspirar al reino del amigo de Francisco: Dios, o su homólogo oscuro, Satanás. En cualquier caso estará entre amigos sabiendo que Dios o el Diablo, son satanistas socialistas. ¿Estarán, por ello y por casualidad, Dios o Satán, entre los anotados en la lista de expertos que anuncia Simón, y que no quiere dar sus nombres para prevenir o evitar mofas del respetable?
Ojo, Simón es muy inteligente y por ahí no pasa: el dar la lista a los periodistas para que todo el mundo se entere de que, entre los inscritos, se encuentra Dios y su Alter Ego Oscuro, Satán. Dios está en el Cielo, mientras Su parte oscura la mantiene encerrada en el paraíso que creó para ella: la Tierra. Poco a poco vamos conociendo el marujeo que, como sección rosa, existe entre los seres celestiales y los mundanos infernales. De ahí que se edificara el Vaticano para reunirles a todos en bacanales refriegas de Almas Eternas.
Menudos capullos y sus capulladas históricas para no dormir. Parece mentira que sean señores mayores travestidos de mujer, en pases teatrales en tan notable edificio como es el Vaticano. Y, digo, tan notable edificio, al haber sido levantado con dinero los trabajos realizados por las putas, en sus putos guetos italiani.
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