El último número de la revista para niños publicado por Diyanet, la Presidencia de Asuntos Religiosos de Turquía, un organismo gubernamental y el cuerpo religioso nacional más alto, contiene una serie de dibujos que glorifican el martirio islámico.
Un colorido cómic titulado “Que Dios bendiga a nuestros mártires, que sus tumbas se llenen con luz sagrada” presenta un diálogo entre padres e hijos, que promueve una idea del martirio religioso islámico.
En una de las viñetas del cómic, un padre le dice a su hijo: “Qué bueno es ser un mártir …” También añade que el martirio da a una persona la oportunidad “de ganarse el derecho de ir al cielo”
En otra viñeta, una chica afirma “Me gustaría poder ser un mártir.” “Si lo deseas lo suficiente, Allah te dará esa oportunidad”, le responde la madre de la viñeta a la chica.
Una declaración en la última imagen sostiene: “Nuestro profeta afirma: el Mártir siente tanto dolor al morir como el que se siente cuando te pellizcan”
Otra declaración atribuida al profeta Mahoma dice: “A un mártir le encantaría volver al mundo real y ser mártir diez veces más después de la honra y el prestigio que recibe en el cielo”
El psicólogo y profesor Dr. Serdar Degirmencioglu criticó con dureza el último número de la “revista infantil” de la Diyanet con sus polémicos cómics, a la vez que denuncia que la introducción de los niños turcos a las ideas del Islam radical ha formado durante mucho tiempo parte de la política del gobierno turco.
“Ellos quieren usar los dibujos para transferir el mensaje del martirio a los niños porque piensan que será más atractivo”, dijo en una entrevista con el periódico turco Evrensel.
“La religiosidad se ha convertido en los últimos años en una herramienta política, literalmente. Ni siquiera lo disimulan. El Ministerio de Religión recibe más dinero que varios otros ministerios combinados y continúa con su trabajo intensivo para inculcar la religiosidad en los niños”, añadió.
El profesor también equipara la mentalidad promovida por dichos cómics con la mentalidad de los que cometieron los ataques terroristas mortales en Ankara y Suruc, así como en Bruselas y París.
“Turquía está abrumada con el dolor de estas matanzas y con los que siguen esa mentalidad ultra-religiosa. Todo esto ha llevado a la muerte de personas. Exactamente la misma mentalidad que ciega a la gente, es lo que la Presidencia de Asuntos Religiosos está tratando de difundir entre los niños en Turquía. Los niños van a crecer y van a correr hacia la muerte cuando los que están en el poder se lo digan”, declaró a Evrensel.
Diyanet sigue y promueve la tradición ortodoxa sunita del Islam no sólo en Turquía, sino también en el extranjero. El sábado el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan inauguró un nuevo Centro de Diyanet de varios millones de América, llamándolo el Centro de Cultura y civilización turco-estadounidense.
Un complejo, el cual, de acuerdo con el diario turco Daily Sabah, contiene “una de las mayores mezquitas turcas”, junto con salas de conferencias, canchas de baloncesto, un restaurante, un baño turco y un centro de investigación cultural, todo construido con fondos de la Presidencia turca de Religiosos asuntos, así como algunas ONG.
Durante la ceremonia de apertura, Erdogan calificó el complejo como “un centro de civilizaciones” y dijo que iba a servir tanto a los musulmanes estadounidenses como a personas de otras religiones, así como para promover el mensaje de amor y compasión del Islam.
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