nos metemos con la la iglesia porque sí. Y es que la misma nos lo pone a güevo (de escroto). Me habréis leído sobre el lobby gay Vaticano, pues que sepáis que lo hay. El mismo Papa ha reconocido que existe una red de influyentes prelados homosexuales, en la curia. Uno de ellos monseñor Battista Ricca, al que nombró prelado del instituto para las obras. En otras palabras: jefe del banco Vaticano. La primera metedura del Papa Francisco ha sido la de no informarse del pasado de Ricca, con un historial de lo más homosexual y de escándalos múltiples. Desde asistencias a prostíbulos masculinos, agresiones, y prácticas homo en ascensores vaticanos.
Tenía en su haber pistolas, resvistas porno y un cofre con preservativos. Al menos era limpio, el tio.
Al parecer y según fuenes, hay quien le ha puesto sobre aviso a Franc para que corrija su error, y al parecer están en ello. Como vemos no nos ponemos ninguna chapa a la hora de cargar contra los actos de los religiosos pero con lo que hacen, se retratan.
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