jueves, 23 de noviembre de 2017

gran oleada feminazi

estoy seguro que, de haber sido mujer y no pertenecer a ninguna ONG, no hubiera caído en las redes escatológicas del poder mediático, para beneficio y disfrute de conocidos y extraños. 
Estos días he asistido como oyente a varias charlas feminazis, que nada tienen que ver con el resto de las féminas, gracias a quien sea. No he visto tanta idiotez junta desde que dejé la niñez. Hay personas que se han quedado colgadas de una cuerda imaginaria y de una  niñez difusa. Estas son las feminazis. Ellas piensan que son la imagen del presente y la enseña a seguir. Nada más lejos.
Han estado durante años sin atreverse a salir del armario, insultando a los pagafantas que se les acercaban, despreciando y odiando al hombre. Están representando a la mujer nazi hombruna, aquella que era más hombre que todos los hombres juntos. Por eso mismo tienden a aparentar lo contrario, pero no engañan a las de su propio género. Con este propósito de integrarse contra los hombres (van vestidas de hombre y son lesbianas... su principal oponente en la caza femenina, por tanto, es el hombre) y su principal objetivo es conseguir dinero del Estado para sus quitas. Dinero que solo lo disfrutan las que pertenecen a la asociación correspondiente. Y, el Estado, no tiene ningún problema en dar dinero a cualquier asociación, Ong, si al tiempo obtiene votos y se beneficia desviando dinero a cuentas en Suiza.
200 millones les ha dado Rajoy a las feminazis por la violencia machista y cualquiera, en sano juicio,  se preguntaría hacia dónde van esos 333 millones de pesetas. Carmena dio 180 millones al movimiento LGTBI, en el día del orgullo gay.
Partidas presupuestarias que salen de no pagar sanidad o medicamentos, o de tener a familias con hambre en nuestros días.
Pero eso, a las feminazis no les importa mientas les vaya cayendo la guita para seguir diciendo tonterías.
Debido a la propaganda de la TV, el cine y las facultades, se han "sensibilizado" (como dicen los progres) y han decidido salir del armario como un elefante en una cacharrería. Sin freno alguno, como  POSEÍDAS. Han estado años haciéndose 2 DEDOS todas las noches, aguantando, y ahora están fuera de sí, cometiendo delitos de escándalo público. Aunque claro, ese delito solo vale para parejas hetero, si lo hacen 2 homosexuales, supongo que tienen VIA LIBRE. 
Pero bueno, todo tiene su parte buena. Por una parte, estas tías jamás tendrán descendencia, con lo cual nadie heredará su TARA genética. Y lo segundo, las bolleras que no salen del armario, son muy peligrosas. Porque odian al hombre, y solo buscan arruinarlo o denunciarlo por maltrato falso.

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